El tráfico de la carretera de acceso a las playas de ses Salines y es Cavallet, en el Parque Natural, se multiplica por cinco en verano. El plan de gestión de aforos de la red viaria de Ibiza de 2016, que fue entregado al Consell el pasado mes de septiembre, apunta que en julio y agosto se contabilizaron una media de 12.186 vehículos (11.801 ligeros y 385 pesados), lo que supone un incremento del 425% con respecto a la cifra de enero y febrero (2.319), la más baja de todo el año.

Para cuantificar la presión de tráfico que soporta esta carretera, se utiliza una estación de aforo, ubicada a la altura de Sant Francesc, durante seis semanas completas al año en meses alternos.

La media del tráfico anual se sitúa en 6.005 vehículos: 6.419 en mayo y junio y 9.421 en septiembre y octubre, mientras que en los dos últimos meses del año baja considerablemente hasta los 2.777, al mismo nivel que en el primer cuatrimestre (2.908 en marzo y abril). Estos datos marcan la punta estacional de esta vía «con tráfico esencialmente playero», según el plan de aforos. Hay que tener en cuenta que en el ámbito del Parque Natural viven un millar de personas, según la primera teniente de alcalde de Sant Josep, Paquita Ribas.

Subida al final de la temporada

El tráfico de 2016 aumentó ligeramente (un 3%) con respecto al año anterior, en el que se registró una media de 5.824 vehículos al día. En julio y agosto de 2015 la Intensidad Media Diaria (IMD) fue de 11.689. En cambio, la subida del tráfico en los meses de septiembre y octubre de 2016 (9.421) en comparación a 2015 (5.066) fue muy acusada (un 86% más), lo que evidenció una mayor actividad en los dos meses que cierran la temporada.

El sábado, con una media de 6.270 vehículos, es el día de la semana de todo el año en el que se registra una mayor afluencia de vehículos en el Parque Natural, según los datos del estudio de 2016, seguido del viernes (6.245). Curiosamente, el domingo (6.000) se encuentra en la cuarta posición, por detrás del jueves (6.011), aunque la cifra es prácticamente la misma.

Joan Cardona, apoderado de Ibifor, la empresa que gestiona los negocios de las playas de ses Salines y es Cavallet, sostiene que el pasado verano no hubo problemas de aparcamiento («sólo se llenaron los parking, destaca) ni atascos en la carretera ocasionados por vehículos mal aparcados. En este sentido, destaca la iniciativa del Consell de impedir con estacas el estacionamiento en los márgenes de la vía e incluso sobre la rotonda de la entrada.

Control del acceso a es Cavallet

En cuanto a es Cavallet, Cardona explica que ha funcionado «muy bien» el control del tráfico. Este verano se ha evitado el aparcamiento de coches en los laterales del acceso, que otros años ocasionaban muchos problemas de atascos.

La empresa cerró un acuerdo con el Consistorio (se firmó un convenio) para colocar, con personal propio, un control situado a 100 metros del cruce de acceso a es Cavallet para impedir la entrada de vehículos cuando en las zonas habilitadas como aparcamiento, en la entrada de la playa, ya no cabía ni un vehículo más.

Ibifor presentó, en su día, un proyecto, que fue rechazado tanto por los técnicos del Parque Natural como por los del Ayuntamiento, para ampliar un poco el ancho del acceso, instalar barreras protectoras en los márgenes y construir una rotonda a la altura de Sa Revista, con una barrera, para forzar a los vehículos a dar media vuelta cuando el aparcamiento de la playa estuviera completo.

La segunda teniente de alcalde recuerda que Ibifor condicionaba la ejecución del proyecto a que el parking pudiera ser de pago, como los de ses Salines, lo cual, resalta, es inviable, aparte de que, técnicamente, el proyecto requería de una serie de cambios. «Ibifor no ha presentado otro proyecto», advierte, al tiempo que apunta que el acuerdo del pasado verano para el control del acceso fue «un apaño», mientras no se halla otra solución. «Mejor esto que nada», señala.