Los policías tutores del municipio de Sant Antoni visitaron el sábado por la noche varios locales de ocio nocturno del núcleo urbano para informar sobre la campaña del Govern balear de prevención del consumo de alcohol y tabaco en menores de edad, informó ayer el Ayuntamiento.

Los agentes, dentro de las actividades previstas en el Plan Municipal de Drogas, visitaron una docena de establecimientos situados en las calles Santa Agnès, Sant Antoni, Colón, Del Mar y Vara de Rey, en las que abundan los bares.

En todos estos locales los agentes tutores recordaron cuál es la normativa en vigor e informaron de la obligatoriedad de colocar a la vista los carteles que les entregaron, en los que se señala la prohibición de vender, o consumir, alcohol y tabaco a menores de edad en todos estos establecimientos.

Esta campaña recuerda la prohibición de admitir o permitir la permanencia en locales como casinos, bingos, salas de juego o espectáculos eróticos a menores de 18 años. Asimismo, la campaña pone énfasis en la prohibición de la entrada de menores de 16 años en discotecas, bares musicales, cafés concierto y salas de fiesta. Infringir esta norma puede acarrear sanciones de 1.001 a 10.000 euros, recordaron desde el Ayuntamiento de Sant Antoni.

Con la misma cuantía se penalizará la venta de alcohol o la permisividad con su consumo por parte de menores. En el caso del tabaco, su venta a menores se considera una infracción grave que se puede penalizar con sanciones de hasta 10.000 euros, mientras que permitir el consumo de cigarrillos conllevará multas de 300 a 1.000 euros, señalaron desde el Consistorio. La semana pasada, la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) de Eivissa anunció su intención de crear una plataforma de lucha contra el botellón y el consumo de alcohol en adolescentes. En una mesa de diálogo en la que participaron numerosos actores sociales, la presidenta de la FAPA, Pepi Costa, insistió en la importancia de que exista una buena coordinación de todas las actuaciones enfocadas a prevenir y reducir el consumo de alcohol y, sobre todo, de no duplicar esfuerzos para aprovechar al máximo los recursos económicos y humanos.

Algunos de los asistentes a esta mesa criticaron que, en la mayoría de los municipios de la isla, los policías tutores, una figura «de referencia» para los adolescentes, no se mantengan durante las vacaciones de verano, justo en una época complicada en cuanto al botellón y el consumo de alcohol y otras sustancias por parte de los menores, ni tampoco fuera del horario lectivo, es decir, por las tardes.