Todos los ayuntamientos de Ibiza, salvo el de Sant Joan, tienen ya decidido prohibir el alquiler de pisos en edificios plurifamiliares, en uso de las atribuciones que prevé la nueva Ley Turística aprobada por el Govern balear. El municipio que gobierna Antoni Marí Marí, Carraca, ha encargado un informe técnico para tomar una decisión al respecto, al considerar que su situación no es la misma que el resto de municipiosCarraca.

En el coloquio entre concejales de turismo y urbanismo que cerró ayer el III Congreso de Viviendas Vacacionales, organizado por la patronal AVAT, todos los ponentes expresaron su rechazo a la mezcla de alojamientos residenciales y turísticos en una misma zona, pues, como afirmó la concejala de Turismo de Santa Eulària, Carmen Ferrer, «a nadie se le ocurriría instalar una fábrica de automóviles en medio de un área residencial».

La concejala de Vila, Gloria Corral, recordó que el suyo «fue el primer ayuntamiento en aprobar en pleno que no quería pisos turísticos» y desgranó la sucesión de problemas que provoca este tipo de oferta. «No se puede mezclar a personas que trabajan todos los días con gente que sólo viene a pasarlo bien», señaló. «Esto no puede tolerarse», añadió la concejala, quien consideró que la Ley Turística del Govern, «con las modificaciones que se han introducido respecto a la redacción original, ha mejorado mucho».

La concejala de Turismo de Santa Eulària, Carmen Ferrer, por su parte, recordó que esta Corporación «hizo una modificación de su planeamiento urbanístico para prohibir el uso turístico de viviendas plurifamiliares». «La calidad y la adecuada atención a las personas requiere una separación de usos», agregó.

El concejal de Turismo de Sant Antoni, José Antonio Ferragut, expresó también su intención de garantizar la «separación de usos» entre residentes y turistas, y manifestó su rechazo al uso turístico de las viviendas en edificios plurifamiliares: «Los pisos son para que los habiten familias o para estancias largas, no son para visitas cortas por parte de turistas», indicó. A la hora de zonificar las áreas previstas en la ley «se mirarán las zonas una a una, a ver qué se puede permitir y qué no», aunque el principio general que se seguirá en el municipio será el de no permitir pisos turísticos en zonas residenciales, afirmó.

En cuanto a Sant Josep, su concejal de Urbanismo, Ángel Luis Guerrero, afirmó: «El uso turístico de edificios plurifamiliares debería prohibirse y nosotros lo vamos a hacer». También recordó los problemas que ocasionan estos alquileres, al provocar la subida de los precios de las viviendas.

El concejal de Sant Joan, Jaume Marí, anunció que el pleno debatirá este asunto en una semana aproximadamente, pero no pudo aclarar si se prohibirán los pisos turísticos, «pues este municipio tiene una situación diferente a los demás». «En todo caso, está claro que es una actividad que se ha de regular», añadió.

La concejala de Santa Eulària consideró que la ley debería haber prohibido por defecto los pisos turísticos y permitirlos sólo si algún ayuntamiento lo solicita. «Pero se ha hecho al revés: se ha dejado el grifo abierto, de modo que en principio están permitidos y si alguien no los quiere, los ha de prohibir», explicó.

El concejal de Sant Josep consideró positivo que sean los ayuntamientos los que tengan la capacidad de decidir qué quieren hacer sobre esta materia.