Una sordera fluctuante. Un zumbido en el oído. Vértigos. La oreja roja por una condritis. Aftas en la lengua. Son algunos de los casos que ven los médicos en las consultas de Otorrinolaringología. En la mayoría de los casos, por suerte, los pacientes se curan relativamente rápido. Sin embargo, estas dolencias y muchas otras pueden ser síntomas de enfermedades mucho más graves cuyo pronóstico, diagnostocadas de forma precoz, puede mejorar mucho. Es el punto de partida de las ponencias que presentará el próximo mes de noviembre el servicio de Otorrinolaringología del Hospital Can Misses en la Reunión de la Sociedad Española de Otorrinolaringología.

El responsable del servicio, Juan Carlos Amor, muestra, orgulloso, las galeradas del documento que se entregará a los asistentes de toda España: 'Enfermedades autoinmunes y reumatológicas', un volumen de casi 200 páginas que recoge trece estudios elaborados por profesionales de los principales hospitales de España. Los profesionales de Ibiza han participado con sus estudios en cuatro de los trece capítulos que lo forman: 'Esclerosis Sistémica y Miopatías Inflamatorias', 'Artritis Reumatoide, Artritis Psoriásica Y Espondilitis Anquilosante', 'Enfermedad de Behçet' y 'Guía clínica de síntomas y signos'. Amor es coautor de los cuatro, en el seguno de ellos participa también la otorrina Noemí Conill y en el tercero, la reumatóloga Ana Urruticoechea, detalla el jefe del servicio.

Separar «el grano de la paja»

Amor señala que él prefiere llamar «sistémicas» a las enfermedades autoinmunes y reumatológicas que centran este año el encuentro nacional. «Afectan a diferentes órganos: riñón, pulmón, corazón, articulaciones, ojos...», justifica. Una de las enfermedades que han estudiado y sobre las que hablará Amor en las jornadas es la esclerosis sistémica, que se manifiesta por alteraciones en la piel, unas manifestaciones muy características: «Los pacientes tienen la boca muy pequeñita y la piel muy plana porque se les llena de colágeno. También tienen las puntas de los dedos blancos por la falta de circulación». El especialista explica que enfermedades como ésta, además de problemas de audición, pueden presentar otros síntomas como úlceras en la boca o la garganta, amigdalitis o sinusitis. «A veces, son las primeras manifestaciones de estas enfermedades», añade. De ahí la importancia de separar «el grano de la paja» cuando llegan a las consultas pacientes con estos síntomas, distinguir aquellos casos en los que estas dolencias se curarán con tratamiento de aquellos en los que son síntomas de otras más graves.

En otro de los capítulos explican que quienes sufren artritis reumatoide o psoriásica y espondilitis anquilosante tienen el equilibrio «más alterado» que otras personas de su misma edad y sexo. La falta de equilibrio, la sinusitis y las alteraciones en el oído «pueden ser las primeras manifestaciones» de alguna de estas enfermedades. Lo mismo ocurre, por ejemplo, con las aftas que puedan aparecer en la boca: «Pueden ser simples úlceras, pero también puede estar detrás una enfermedad reumatológica». Para distinguir un caso de otro se tiene en cuenta el tamaño, si se prolongan durante más de una semana, el número y también si ese paciente las ha tenido antes o han comenzado a aparecerle ahora de forma recurrente. «Se trata de tener en cuenta criterios médicos que se conocen por la experiencia», indica el jefe del servicio, que destaca que no todas estas enfermedad muestran marcadores que indiquen de forma clara que el paciente las padece. Sólo en algunas, como la esclerodermia, se pueden detectar anticuerpos específicos, comenta.

El médico insiste en la importancia de la detección precoz de estas enfermedades para comenzar a tratarlas cuanto antes, ya que los pacientes, si no es así, pueden quedarse ciegos, sordos o perder partes del cuerpo que se necrosen. En este sentido explica que en algunas vasculitis existe el riesgo de que el paciente sufra una insuficiencia renal: «Si comienzas el tratamiento a tiempo consigues que remonten, sino, igual cuando empiezas los riñones están destrozados. Estamos hablando de enfermedades graves».