El Ayuntamiento de Sant Antoni justificó ayer su negativa a que la feria de las fiestas de Sant Bartomeu se instale este agosto en el paseo marítimo, como en años anteriores, por su decisión de «descentralizar las actividades que se concentran en el paseo para dar vida a otras zonas del núcleo urbano», como manifestó el Ayuntamiento en un comunicado, en respuesta a las quejas de los feriantes por el cambio de ubicación.

Los responsables de la feria amenazaron el lunes con no montar las atracciones si el Ayuntamiento no les buscaba un emplazamiento de su agrado, pero el equipo de gobierno les recordó ayer que el año pasado ya fueron avisados de que era la última vez que se les autorizaba a montar la feria en el paseo marítimo y que tendrían que desplazarse a ses Variades.

El Consistorio también manifestó su deseo de que el Passeig de ses Fonts y el paseo marítimo queden despejados de «obstáculos para que los residentes y los visitantes puedan pasear».

Los feriantes denunciaron que ses Variades «es un lugar totalmente apartado de la zona de verbena y del conjunto de la fiesta», a lo que el Ayuntamiento respondió que el programa de las fiestas de este año se ha dispersado por otras zonas como la plaza Nord, es Caló des Moro o ses Variades, con lo que el Consistorio entiende que «esta zona reunirá el suficiente atractivo comercial» para la feria.