El Hospital Can Misses dejó de administrar un antibiótico a dos pacientes ingresados tras una alerta de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, dependiente del Ministerio de Sanidad. Este organismo ordenó, ayer por la mañana, la retirada del lote 1603390 del antibiótico de uso hospitalario Linezolid Accordpharma, que se había distribuido en los hospitales de Balears, por no pasar las pruebas de esterilización realizadas en el Laboratorio Oficial de Control de Medicamentos.

En concreto, en las islas, además de en Can Misses, se ha distribuido en el hospital Mateu Orfila de Menorca, en los hospitales comarcales de Manacor e Inca y en Son Llàtzer y Son Espases, en Palma. Es decir, en todos los hospitales de la red pública.

Fabricado por Demo S.A. Pharmaceutical Industry y comercializado por Accord Healthcare, la agencia ha calificado el defecto en la clase 1, es decir, aquella que se corresponde con un posible riesgo más elevado para la salud.

A pesar de esto, desde el Hospital Can Misses restaron ayer importancia al suceso. Fuentes del servicio de Farmacia explicaron que alertas como la del Linezolid Accordpharma se producen de forma bastante habitual. En este sentido, explicaron que ni siquiera estaban seguros de que las dosis que se habían administrado a esos dos pacientes procedieran del lote afectado. Por precaución, se les retiró la medicación y se les administraron otras dosis procedentes de lotes no afectados, detallaron desde el Área de Salud de Ibiza y Formentera.

En este mismo sentido se manifestó Olga Delgado, jefa del servicio de Farmacia de Son Espases, quien también restó importancia a esta calificación. «Al parecer este lote no ha pasado los controles de calidad. Se trata, en definitiva, de un problema de calidad, no clínico. Y los problemas de esterilización que al parecer ha tenido este lote no provocan efectos secundarios», subrayó la jefa de servicio, que detalló que en el hospital mallorquín eran ayer cinco los pacientes a los que se estaba administrando este antibiótico. En el caso de Son Espases, se sustituyó la administración por vía parenteral por dosis orales del mismo fármaco, con las que, explicó Delgado, intentarán pasar el fin de semana. Si los pacientes no pueden tomar pastillas, se buscará otro antibiótico que se les pueda inocular a través de una vía para continuar el tratamiento.

Desde la conselleria balear de Salud aseguraron que todos los hospitales de las islas recibieron ayer la alerta y han retirado estos antibióticos.