El personal de seguridad del aeropuerto de Ibiza decidió ayer en asamblea convocar una huelga indefinida a partir de la próxima madrugada. La reunión tuvo lugar en la sede de los sindicatos en Can Misses y se prolongó durante más de una hora. En ella se informó a los cincuenta trabajadores asistentes de los puntos acordados en la reunión con Prosegur el pasado martes. El resto de la plantilla, que no pudo acudir, fue informada vía Whatsapp.

Todos los presentes votaron a favor de una huelga indefinida. A partir de las 00:00 de esta medianoche, el personal hará manifestaciones en el aeropuerto con la intención de que Prosegur acepte los puntos esenciales que reclaman para eliminar la «precariedad» laboral en la que se encuentran. «Que sea una huelga indefinida conllevará que tendremos que estar todos los días esperando a que nos ofrezcan mejores condiciones. Sí que es cierto que las horas de espera en los controles serán aún más criminales», explicó Ana López, presidenta del comité de trabajadores.

Los asistentes no se han conformado con la oferta de Prosegur. La empresa había aceptado, el martes, habilitar un espacio en el parking del aeropuerto gratuito para los empleados y aumentar la plantilla en 14 trabajadores, de los 22 que exige el comité, con la intención de que se cancelase la huelga.

El objetivo del paro, según han apuntado los trabajadores del aeropuerto, es conseguir un sueldo digno con el que no haga falta hacer horas extra y que abonen los 200 euros que ofrecen de incentivo a los eventuales que traen de fuera también a los empleados residentes en la isla.

López explicó que la gestión de Ibiza ha empeorado desde que Trablisa fue sustituida por Prosegur. La empresa actual, ha «agraviado» la situación con la entrada del plus económico. «Con Trablisa teníamos un expediente diferente, pero no un mejor trato», subraya.

La presidenta del comité de empresa responsabiliza a AENA de no proporcionar a Prosegur el dinero suficiente para ofrecer un buen servicio. «Con Trablisa al mando, AENA no nos exprimía tanto. Al final de todo, la repercusión de todo es el tipo de expediente que AENA oferta», critica.

El comité ha insistido en que intentará velar por el cumplimiento de los servicios mínimos en el aeropuerto y para que haya «paz» y no se produzcan confrontaciones con los compañeros que decidan ir a trabajar durante la huelga. «Entendemos que el derecho a la huelga es un derecho fundamental, pero es verdad que la gente que quiera ir a trabajar nos hará una faena», concluyó López.