La bandera roja seguirá ondeando en la playa de Talamanca al menos durante todo el fin de semana después de que los resultados de los análisis de las muestras del agua tomadas ayer hayan revelado que "no es apta para el baño". Esta mañana se han vuelto a tomar muestras de agua, pero el resultado de las analíticas no estarán hasta dentro de 48 horas, el lunes. El protocolo de control y calidad de las aguas de la zona de baño obliga a restringir la entrar al mar de los bañistas y a mantener, al menos hasta el lunes, la bandera roja, según una nota del Ayuntamiento.

En todo caso, el viejo emisario de la depuradora que desembocaba en la bahía de Talamanca se ha clausurado definitivamente esta mañana a las 11.30 horas después de 32 años en funcionamiento y haber provocado muchos problemas. La nueva canalización que sale al mar por la zona de es Botafoc ha empezado a funcionar esta mañana a las 10 horas, tal como anunció ayer la conselleria balear de Medio Ambiente.

Los empresarios de Talamanca se quejaron el viernes de las pérdidas que ha supuesto la prohibición del baño en la playa. Alessandro, encargado de las hamacas desde hace 12 años, sostiene que ayer la actividad «se redujo un 80%». «Es un desastre», lamentó, al tiempo que recalcó que la pérdida de negocio no se limita sólo a los días en que la playa ha estado cerrada. «La gente que hoy -por ayer- ha venido a la playa y ha dado media vuelta, ya no volverá aquí durante sus vacaciones. Toda esta gente la perdemos», advirtió.

Del mismo modo, Alessandro, que en los años que lleva trabajando en Talamanca ya ha vivido «al menos 15 rupturas del emisario», aseguró que esta playa ha perdido en los últimos años «el 30% de usuarios locales», que acostumbraban a ir a bañarse los domingos.

Devolución de 40 tiques

Devolución de 40 tiques

Durante el jueves, el primer día de prohibición del baño, Alessandro tuvo que devolver «40 tiques» de personas que decidieron marcharse tras ver cómo se izaba la bandera roja. También criticó que el resultado de los análisis no se conozca el mismo día y que se cierre la playa por precaución sin saber si el agua es apta o no para el baño.

Por su parte, Daniele, propietario de una pizzería italiana a pie de playa, aseguró ayer por la tarde que su negocio perdió «más de la mitad» de lo que acostumbra a ingresar en una jornada de esta época del año. Los otros establecimientos también vieron mermados sus ingresos, por lo que plantean presentar una «reclamación conjunta» para exigir a la Administración que les compense el perjuicio sufrido.

La Agencia Balear del Agua (Abaqua), dependiente de la conselleria balear de Medio Ambiente, preveía inicialmente que el viernes se pusiera en marcha el nuevo emisario de la depuradora que vierte las aguas al mar por es Botafoc, pero finalmente se tuvo que retrasar a hoy por la mañana.

El gerente de Abaqua, Antoni Garcias, explicó a este diario que un problema «en una junta» obligó a posponer la conexión del viejo emisario con el nuevo. Los operarios estuvieron trabajando durante casi todo el día en la zona donde empieza la parte submarina del emisario, en es Botafoc.