Quizás pasar una noche en un tipi, en plena naturaleza ibicenca, pueda resultar romántico y bucólico. Sin embargo, la perspectiva cambia cuando el incremento de alquiler de tipis para pernoctar es una consecuencia directa de la problemática que atraviesa la isla en materia de escasez de vivienda.
La página Airbnb dedica un apartado titulado “Los mejores tipis para alquilar en Ibiza” como si se tratase de un inocente turismo rural, cuando la realidad es que hay quienes intentan hacer caja con el turismo vacacional alquilando una diminuta tienda de campaña a precio de habitación de hotel en donde, en la mayoría de los casos, la ducha se encuentra al aire libre y el váter es de compost.
En Airbnb hay una decena de alquileres de tipis y todos se presentan utilizando la misma poética: un lugar en donde estar en contacto con la naturaleza, la mejor forma de conocer la Ibiza auténtica… un mensaje ‘flower power’ para maquillar el aspecto mercantilista que radica en toda transacción económica.Caravanas, tipis, habitaciones minúsculas... el gran negocio del verano
Caravanas, tipis, habitaciones minúsculas... el gran negocio del veranoEl negocio del alquiler de tipis es similar al de caravanas o al de habitaciones minúsculas por 500 euros al mes. Es sacar el máximo provecho económico a unos pocos metros cuadrados, porque el metro cuadrado en Ibiza se acerca mucho al que puede llegar a tener el de Manhattan.
Los tipis que se alquilan en Airbnb son todos muy similares y el precio de la noche fluctúa entre los 60 y 90 euros. En muchos, además, hay que sumar 5 euros de limpieza o 5 euros por poner la lavadora.
El reclamo es alquilar “un tipi con encanto”, como un anuncio de una tienda de estas características en Cala Llonga, que se alquila por 65 euros la noche (455 euros a la semana), un mínimo de dos noches. Se ubica en una casa en la que viven “artesanos” y “artistas” y en la última semana ya ha recibido unas 500 visitas.
Otro tipi que se alquila en la zona de Sant Josep con el nombre de The Moonlodge a 77 euros la noche (539 a la semana) se publicita en Airbnb explicando que “se ha creado con amor y consideración para ser lo más ecológico posible”. Dispone de una ducha al aire libre y tiene mucho éxito entre los usuarios de esta web, ya que a día de hoy solo le quedan 6 días libres en julio y 7 en agosto.
Más que un tipi, el Beach Camp es casi una habitación de hostel. En realidad se trata de una tienda de campaña de grandes dimensiones en las que se han colocado seis sacos de dormir en el suelo pegados uno a otro. El precio: 360 euros la noche para los seis ocupantes.
En Sant Joan se alquila uno (a 80 euros la noche y un mínimo de 5 noches) que para el mes de agosto ya lo tiene todo completo a excepción de una noche. Quizás su éxito se deba a que “se trata de un lugar mágico para alojarse, a la sombra de un algarrobo”, tal y como reza el anuncio.
