El Govern balear prevé que el decreto de protección de la posidonia, cuyo borrador fue presentado el pasado martes por el conseller de Medio Ambiente Vicenç Vidal, pueda entrar en vigor y aplicarse en 2018. Vidal precisó ayer en Formentera, donde informó sobre el plan de lucha contra las serpientes, que ahora se abre un plazo de participación de 20 días para que todos los colectivos y implicadas puedan expresar su opinión con propuestas y sugerencias.
Previamente, la conselleria ya hizo consultas sobre la oportunidad de hacer el decreto: «La gente está de acuerdo en el objetivo de la conservación, por lo tanto ahora damos 20 días para debatir el cómo sobre un borrador concreto en el que el Govern ha expresado su opinión», dijo.
Cuando acabe ese plazo comenzará la redacción definitiva del decreto y luego se remitirá al Consell Consultiu para ser finalmente aprobado por el Consell de Govern. Dado este proceso, el conseller estimó que «antes de que acabe 20017 se puede aprobar este decreto», por lo que se aplicaría el año que viene.
El borrador de protección de la posidonia recoge un régimen sancionador. En caso de que el daño a la pradera sea muy grave, la multa puede oscilar entre los 100.001 y los 450.000 euros, y considera como tal «los incumplimientos acreditados que supongan la destrucción de más de 10 metros cuadrados de posidonia».
Las sanciones
Las sancionesEl texto define como grave «la destrucción de una superficie superior a un metro cuadrado de pradera, e inferior a 10». En este caso las sanciones oscilarán entre los 6.001 y los 100.000 euros.
La infracciones leves son los del propio decreto «con independencia de la demostración efectiva de daños materiales a la especie», para los que se prevén multas de los 100 a 6.000 euros.
Como criterios para medir el tipo de infracción se aplica lo recogido en la ley 42/2007 del Patrimonio Natural y Biodiversidad y en la Ley balear 5/2005 para la conservación de los espacios de relevancia ambiental (LECO).
El documento también regula la instalación de fondeos fijos con boyas ecológicas mediante autorización de la conselleria balear de Medio Ambiente.
En este caso se podrá dar permiso para instalar «fondeos fijos sobre fondos de posidonia», ya sea mediante boyas ecológicas unitarias o campos de boyas del mismo tipo.
Las embarcaciones profesionales que precisen fondear sobre praderas de posidonia deben usar «sistemas permanentes de fondeo de tipo ecológico», matiza el borrador del decreto.
Para el montaje de estos sistemas permanentes, el titular de la actividad deberá solicitar autorización administrativa ante la Demarcación de Costas, competente en esta materia. Para autorizar los fondeos en espacios calificados de relevancia ambiental de deberá contar con un informe favorable del organismo gestor del espacio, en este caso la conselleria balear de Medio Ambiente.
Comité posidonia
Comité posidonia
El decreto también contempla la creación de un comité asesor permanente, que estará adscrito a la dirección general de Espacios Naturales y Biodiversidad.
Sus funciones serán las de proponer los criterios que permitan evaluar los planos y proyectos de la administración relacionados con la posidonia y evaluar periódicamente su conservación, se indica en el documento.
