El aeropuerto de Ibiza ha recibido en el primer cuatrimestre del año 948.282 pasajeros (entre las llegadas y las salidas), un récord absoluto (uno más) que pulveriza los registrados del año pasado. De hecho, esta cifra representa un crecimiento del 19,8% con respecto al mismo periodo de 2016, lo que se plasma en 156.808 personas más en sólo cuatro meses. Teniendo en cuenta que el pasado fue el mejor ejercicio turístico de la historia, esta temporada amenaza con romper las costuras de la isla.

Hasta ahora, y como en 2016, los cuatro meses del año se han saldado con crecimientos. Un 10,9% en enero, un 10,5% en febrero, un 4,4% en marzo y un 35,4% el pasado abril.

La importancia de estas cifras radica en que se producen en los meses de menor actividad aeroportuaria. Si estos crecimientos se repitieran de junio a octubre (como sucedió en cierta medida el año pasado, cuando se cerró con 7,4 millones de pasajeros), la estadística rompería el techo de la terminal.

Más pasajeros que nunca

El nuevo salto hacia adelante del tráfico aeroportuaria detectado en abril se explica con un par de cifras: 462.261 pasajeros frente a los 341.394 del mismo mes del año pasado (120.867 más), lo que se traduce en una subida del 35,4%. Y 4.532 movimientos de aviones (entre los aterrizajes y los despegues), un 14,6% más respecto a los llevados a cabo en abril de 2016.

En el conjunto de estos cuatro meses, la única pista del aeropuerto ha acogido un total de 11.093 operaciones, un 6,9% más.

El tráfico internacional se mantuvo al alza el mes pasado, acumulando 226.902 viajeros, lo que representa una subida del43,8%. El flujo de viajeros hacia Ibiza procedentes de aeropuertos nacionales también se incrementó en abril, en este caso en un 28,2% al acumular 234.917 pasajeros, según la estadística de AENA.

Aparte del nacional, el mercado británico sigue siendo el más importante para Ibiza, y el mes pasado registró un crecimiento del 30,6% con 69.114 viajeros. Italia es el tercer país en tráfico: 50.397 personas, un 40,1% más.