­El pleno del Ayuntamiento de Sant Josep debatirá este jueves dos propuestas del equipo de gobierno destinadas a garantizar una mayor seguridad y más control sobre los locales de ocio del municipio.

En primer lugar, el equipo de gobierno se propone aprobar una ordenanza que obligue a los establecimientos de ocio que tengan autorizados aforos superiores a las 200 personas a disponer de un sistema automático de control.

El equipo de gobierno que preside Josep Marí Ribas considera que esta medida es importante tanto para garantizar la seguridad como para poder actuar administrativamente en caso de incumplimientos en materia de aforo, puesto que hoy en día no existe un sistema de control real, informan a través de una nota de prensa.

Los locales de ocio tendrán que instalar sensores de paso para poder contabilizar el número de usuarios. También estarán obligados a colocar, en un lugar muy visible, un cartel indicando el aforo máximo y tendrán que designar a una persona responsable del control del aforo, que tendrá que evitar que la afluencia de público no supere en ningún momento el aforo permitido.

Los establecimientos dispondrán de un año para adaptarse a esta ordenanza, se añade en la nota facilitada por el Consistorio.

Por otro lado, el equipo de gobierno también plantea obligar a todos los locales de ocio incluidos al artículo 26 de la Ley Turística que tengan música a contar con limitadores acústicos, puesto que la actual normativa sólo contempla como ámbito de actuación la zona de Platja d´en Bossa.

La primera teniente de alcalde y concejala de Gobernación, Paquita Ribas, explica en el comunicado municipal que «no tiene sentido localizar el tema de los limitadores a una zona en concreto, puesto que actualmente la oferta de ocio y de música está repartida por diferentes zonas del municipio, por el que no se pueden hacer discriminaciones, obligando a unos a tener más control que los otros».