Rachas de viento de hasta 74 kilómetros por hora y fuertes lluvias que dejaron hasta 25 litros en distintos puntos de las Pitiusas provocaron ayer problemas en el transporte marítimo y terrestre. Una situación que se repetirá hoy y que se agravará mañana sábado, cuando Ibiza y Formentera entren en alerta naranja por viento, ya que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé rachas de hasta 100 kilómetros por hora y olas de 4 a 7 metros.

El temporal de viento provocó a lo largo del día de ayer la cancelación del 80% de los trayectos entre las Pitiusas. Concretamente se cancelaron 24 de los 30 enlaces, en cada sentido, programados entre las islas por parte de las cuatro navieras que operan en esta línea marítima. La compañía Baleària solo operó desde Vila, a las 9,15 horas, con el buque mixto de pasaje y carga ´Posidonia´, que también hizo el trayecto de vuelta con cierto retraso. Por la tarde este barco partió de Ibiza pasadas las 17 horas y regresó sobre las 18,30 horas. En cambio el catamarán ´Maverick´ de esta naviera permaneció amarrado en el puerto durante todo el día mientras que el ´Formentera direct´ está reparando un golpe que se dio en el patín de babor el pasado 16 de enero al atracar en el muelle de la Savina, por lo que no entrará en servicio hasta próximo sábado. La compañía Mediterránea Pitiusa y Aquabus cancelaron, por su parte, todos sus enlaces.

La única naviera que mantuvo algunos de los trayectos fue Trasmapi que cubrió las salidas desde Ibiza a las 7.30 horas y a las 10 horas de ayer. Desde la Savina sus catamaranes zarparon a las 8.30, a las 9 y a las 13.30 horas, en ambos sentidos. Por la tarde canceló todas las salidas programadas y solo realizó una salida en cada sentido a las 18 horas.

Con esta dirección e intensidad del viento la parte más complicada para la navegación entre Ibiza y Formentera es el tramo del trayecto entre el puerto de Vila y el siempre complicado paso de es Freus, a la altura de s´Espalmador.

En Ibiza, las fuertes rachas de viento derribaron cuatro tipuanas en la calle Jaume I, también afectada por las obras en la plaza de la Parque, y una tipuana y un ficus que se encontraban en la zona central de la plaza. La tipuana de la zona central quedó dañada por el viento, según informó el Consistorio, y los operarios tuvieron que derribarla para evitar riesgos. El Ayuntamiento señaló que debido a los trabajos de remodelación, las tipuanas, que tienen las raíces muy superficiales habían quedado muy desprotegidas al quitarse el pavimento antiguo. Las tipuanas, al igual que sucede con las otras que han caído con anterioridad, serán sustituidas por melias y el ficus por una koelreuteria paniculata.

Las intensas lluvias también provocaron inundaciones en algunos locales comerciales de las calle Carlos V y Bisbe Huix, grandes charcos en las rotondas de Joan XXIII y Can Misses, arquetas levantadas en distintos puntos de la ciudad y también pararon durante toda la jornada las obras de Vara de Rey, donde ya se está hormigonando el firme, un trabajo imposible de realizar con lluvia.

Por otro lado, los bomberos tuvieron que intervenir a las 13 horas para sofocar un leve incendio en la calle Abad y la Sierra, número 3, provocado por los chispazos de unos cables sueltos de la fachada. La intervención de los agentes se realizó sin incidencias y no hubo que evacuar a ningún vecino.

Las caídas de árboles se produjeron en distintos puntos de la isla, como en el Puig d´en Fita, en Siesta, donde un pino cayó sobre una casa provocando daños leves sobre el inmueble.

En Sant Josep, una mimosa cayó de madrugada a consecuencia del viento sobre el camí de sa Capelleta dificultando el paso a los vecinos. Los operarios municipales se desplazaron a primera hora para cortar el tronco con una motosierra. En Cala de Bou se produjeron pequeñas inundaciones en calles y rotondas. En Sant Antoni un arqueta que saltó en el polígono de Montecristo.