La incorporación de una nueva lancha a las labores de vigilancia de las aguas del Parque Natural es la novedad más significativa que registrará la protección de las praderas de posidonia de las Pitiusas de cara a 2017, en cuanto a medios se refiere. Aunque el Govern viene anunciando un aumento del personal dedicado a esta labor, todavía no se ha concretado cuántas efectivos más habrá vigilando las aguas de este espacio protegido por numerosas figuras jurídicas, pero que es tomado al asalto por cientos de yates de gran eslora durante bastantes meses al año. Tampoco está previsto cambiar para este verano el régimen sancionador actualmente en vigor, que permite a los infractores cometer sus destrozos de posidonia prácticamente de manera impune, por la escasa cuantía de las multas que aplica el Govern. La conselleria de Medio Ambiente quiere esperar precisamente a tener aprobado el decreto en el que está trabajando para actualizar ese régimen sancionador.

El conseller de Medio Ambiente del Govern, Vicenç Vidal, así como el presidente del Consell ibicenco, Vicent Torres, han coincidido en considerar que tan importante como la sanción es la «información» a los yates que llegan a la zona. De hecho, Torres presentó anteayer en Fitur su campaña ´Navega en verd´, con la que se quiere concienciar a los patrones de los barcos para que fondeen allí donde pueden hacerlo.

En el otro foco de fondeos masivos de las Pitiusas, el municipio de Sant Josep, su Ayuntamiento tampoco tiene previsto acometer medidas concretas o impulsar peticiones ante otras administraciones para aminorar los daños que todos los veranos causan cientos de yates en casi todas las calas que circundan a este municipio.