Continúa la ofensiva de la sociedad pitiusa contra la pretensión de la conselleria balear de Turismo, que dirige Biel Barceló (Més per Mallorca), de legalizar el alquiler de pisos a turistas. Ayer fueron los presidentes de todas y cada una de las patronales implantadas en Ibiza y Formentera, junto con los dos sindicatos mayoritarios -UGT y CCOO-, los que escenificaron una muy poco frecuente unidad de acción, al ofrecer una rueda de prensa conjunta en la que se manifestaron en contra de la regularización de esta oferta, ahora ilegal. Además, exigieron el inmediato incremento de la plantilla de inspectores turísticos que tiene ahora el Consell, que se limita a cinco personas, «que además sólo inspeccionan a las empresas legales», según recalcaron estas entidades.

En el acto, que tuvo lugar en la sede de la Pimeef, estuvieron presentes el presidente de dicha entidad, Alfonso Rojo, además de los principales dirigentes de la patronal hotelera Fehif, Juanjo Riera; del Fomento del Turismo, Lucas Prats; de la CAEB pitiusa, Joan Bufí; de la Cámara de Comercio, Juanma Costa, y de la Asociación de Viviendas Vacacionales, Roberto San Esteban. Por parte de los sindicatos acudieron Consuelo López (CCOO) y José Pedrido (UGT).

«Nos oponemos a la mezcla de usos turísticos y residenciales en los edificios plurifamiliares porque es un grave error. Generará problemas de convivencia por la disparidad de horarios que tienen los turistas y los residentes», advirtió Juanjo Riera, quien señaló que la regulación de los pisos particulares que se alquilen «quebrará el modelo turístico» que históricamente han tenido las Pitiusas y supondrá un «caos» generalizado en la sociedad.«Sólo cinco inspectores»

«Sólo cinco inspectores»Junto a este argumento, ya expresado reiteradamente con anterioridad, casi todos los participantes en la rueda de prensa criticaron que apenas haya inspectores turísticos en la isla para hacer frente a la avalancha de plazas de alojamiento ilegales que hay en la isla todos los veranos. «Sólo hay cinco y, además, sólo inspeccionan a las empresas legales», lamentó en un momento determinado la gerente de Fomento, Ángeles Nogales.

El presidente de la Pimeef, Alfonso Rojo, explicó que «el proyecto de ley no contempla ninguna partida económica para la inspección turística» de los pisos que se piensan regular como aptos para el alquiler turístico. «Leyes hay muchas, pero ha de haber medios para hacerlas cumplir», recalcó, y dijo ser «escéptico», porque pese a la buena voluntad de regular, «no se está dotando de los medios de inspección que serían necesarios ni se está sancionando a los infractores», afirmó.

Todos los empresarios consideraron que la isla ha alcanzado ya su techo de plazas de alojamiento y los pisos turísticos constituyen una oferta que «ya está cubierta con las viviendas vacacionales», señaló el Fomento.

De hecho, el presidente de la patronal de las casas turísticas de campo, Roberto San Esteban, afirmó que «no sólo no hay que legalizar los pisos turísticos, sino que hay que perseguirlos, multarlos y sacarlos del mercado». Además, denunció que la multitud de intermediarios que pululan en este sector a menudo «se llevan el dinero fuera de la isla, de España e incluso más allá de la Unión Europea».«Infraestructuras saturadas»

«Infraestructuras saturadas»El presidente de la Cámara de Comercio en Ibiza y Formentera, Juanma Costa, recordó que «la oferta tradicional e histórica siempre ha distinguido entre lo residencial y lo turístico y ahora esto se está trastocando». La ampliación de plazas que supondría legalizar los pisos turísticos «provocará una saturación en las infraestructuras públicas», alertó Costa. Además, «no hace el mismo gasto un turista de piso que uno que va a la oferta reglada».

Los sindicatos advirtieron de que los pisos turísticos acabarían degenerando en «bolsas de economía en negro», especialmente en el servicio de limpieza, y empeorarían las condiciones de contratación. Además, recordaron el encarecimiento de la vivienda que supondría este tipo de oferta.