­La autopsia ha revelado que Katia Ferreira Santos, la mujer de nacionalidad brasileña que desapareció en Ibiza junto con su pareja y cuyo cadáver fue hallado en una playa del municipio valenciano de Cullera la semana pasada, murió por ahogamiento, confirmaron ayer fuentes oficiales. Además, los forenses no han encontrado ningún signo de violencia en el cuerpo de la mujer, que tenía 37 años de edad, si bien aún están pendientes de conocer los resultados de toxicología.

Por otra parte, los investigadores no han encontrado hasta el momento ninguna pista que les haga sospechar que Katia Ferreira fuera víctima de un homicidio. Por contra, según los testimonios recabados y las pruebas analizadas, todo empuja a pensar que la mujer fue víctima de un accidente, probablemente al caer al mar. En cualquier caso los investigadores insisten en que aún no tienen certezas y que no descartan ninguna hipótesis, sobre todo mientras la pareja de la brasileña, el madrileño Marcos Pérez de la Torre, de 36 años, siga sin aparecer.

La desaparición de la pareja fue denunciada en Madrid ante el Cuerpo Nacional de Policía el pasado 8 de diciembre. Días después el coche de él fue encontrado, ya bastante desvencijado, en un paraje de Cala Llonga.

Muy cerca de donde apareció el coche, al final de la calle Kilimanjaro, hay una cueva a la que solía acudir Marcos, según han explicado a los investigadores algunas de las personas interrogadas. Una de las hipótesis es que la pareja se encontrara en esta pequeña sima, a la que se accede desde un pequeño acantilado y que tiene salida al mar en su parte final, y que cayeran al agua o fueran arrastrados por el embate de las olas, si bien se trata tan solo de una suposición. El rastro de la pareja se perdió el 18 de noviembre, justo cuando un fuerte temporal azotó la costa de Ibiza y Formentera.

Inspección en la cueva

Inspección en la cuevaTanto la Policía Nacional como los especialistas del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) han inspeccionado la cueva y no han encontrado nada que haga pensar que la pareja pudiera haber sido arrastrada por el temporal.

Los investigadores han tomado declaración a numerosas personas que mantenían relación con la pareja, que comenzaron a salir juntos en octubre. Al parecer, Marcos dijo a su familia por teléfono que tenían intención de casarse y que antes acudirían a Madrid y a Brasil. Los investigadores también han descubierto que Katia protagonizó numerosos altercados este verano en Ibiza que acabaron con cuatro detenciones en el plazo de trece días. Todos fueron desórdenes públicos derivados, al parecer, de la ingesta de alcohol y otros tóxicos, así como de un posible trastorno. Una amiga suya declaró que teme que fuera asesinada porque se relacionaba con gente del mundo de la droga.