Agentes de la policía judicial de la Guardia Civil, inspectores de Trabajo del Govern balear y agentes de la Policía Local de Santa Eulària irrumpieron el viernes por la noche en un inmueble de la calle De la Sabina de Puig d’en Valls en el que varios vecinos de la zona habían denunciado que se está practicando la prostitución.

Durante la inspección, los inspectores de Trabajo levantaron acta por la posible vulneración de los derechos de los trabajadores. Por su parte, la Policía Local de Santa Eulària abrió un expediente sancionador tras comprobar que en el lugar se está realizando una actividad económica sin disponer de licencia municipal, informó ayer el Ayuntamiento.

Los agentes de la policía judicial de la Guardia Civil acompañaron durante la inspección a los funcionarios del Govern y a los agentes locales, pero no realizaron detenciones, ya que todas las mujeres que en ese momento estaban trabajando en el lugar declararon que estaban en este inmueble por voluntad propia.

En un principio, los inspectores y los agentes acudieron a un edificio de Jesús en el que otros vecinos habían advertido de que se había instalado un negocio de prostitución. Finalmente comprobaron que el negocio se había trasladado a Puig d’en Valls.

Traslado de zona

Al parecer, se trata de un prostíbulo que el pasado verano se había instalado en un chalé de la zona de sa Carroca, en el municipio de Sant Josep, y que generó numerosas críticas entre el vecindario.

Finalmente, esta casa de citas fue desmantelada tras las denuncias del Ayuntamiento de Sant Josep y de la policía judicial de la Guardia Civil.

El proceso para suprimir el prostíbulo duró varios meses. Los responsables fueron denunciados por delitos contra el derecho de los trabajadores.