No hay mejor momento para visitar una fuente que después de las lluvias intensas del otoño, cuando su pila está llena de agua y los alrededores están cubiertos de verde hierba. La font de Balàfia, además, está restaurada, impecable, y situada en un camino rural que se ensancha en ese tramo formando una especie de plaza que realza el encanto del conjunto hidráulico. Y es que esta fuente de Sant Llorenç es una obra muy completa, que está adaptada tanto al suministro de agua para el consumo humano como a su uso como abrevadero y también para el aprovechamiento agrícola.

En el 'Inventari del patrimoni hidràulic de les Pitiüses', en el tomo dedicado a los municipios de Sant Joan y Santa Eulària, su autor, el arquitecto Juanjo Serra, señala que la fuente ya figura en el plano de Eivissa del capitán de ingenieros José García Martínez, del año 1765. Cada mes de agosto, en la plaza se celebra una tradicional ballada pagesa y una antigua historia cuenta que cuando uno de los miembros de la comunidad de regantes moría, el resto, para recordarlo, no encalaba la fuente durante todo un año.

La capilla de sa font de Balàfia mira al Este y, en la actualidad, sus paredes y escalones interiores están pintados de rojo granate, mientras que los paramentos exteriores son de blanca cal; en las calas realizadas en los muros se ha comprobado que, aunque posteriormente fueron encalados y se mostraron blancos durante mucho tiempo, en sus inicios, el interior estaba pintado de almagre, una variedad natural de ocre rojo. Sobre el arco de la capilla hay una pequeña cruz de madera, que contribuye a que la construcción, efectivamente, recuerde a un oratorio. Y, detrás, destaca un campo de olivos.

En el blog del departamento de patrimonio del Consell (patrimonideivissa.wordpress.com) puede leerse que la pila o abrevadero podía haber sido originalmente el mortarium o trapetum de un molino de aceitunas, ya que, al parecer, y aunque la pila de Balàfia está muy retocada y picada para poder asegurarlo, era habitual reutilizar esas piedras de antiguos molinos para fuentes y pozos. Sa font de Balàfia fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC), con la tipología de lugar de interés etnológico, en septiembre de 2010. La protección alcanza no sólo la fuente y la pila de piedra viva sino también la plazoleta y los restos de los muros antiguos soterrados y la galería subterránea que comunicaba la fuente con el safareig (alberca) principal, además de los muros de piedra seca que delimitan la plaza y en uno de los cuales se halla encajada la fuente y la balsa de distribución del riego. El entorno de protección abarca un radio de setenta metros, con lo que enlaza con el área protegida del cercano poblado fortificado de Balàfia.