Un conductor fue interceptado ayer al mediodía por otros condutores tras invadir el carril contrario en la salida del núcleo urbano de Sant Antoni, entre la rotonda del Lildl y Eroski. El Toyota Auris gris oscuro que conducía casi colisionó con una furgoneta blanca, mientras era grabado por el copiloto de otro coche que vio previamente en su comportamiento al volante síntomas de ebriedad.

"La furgoneta -que iba de frente- iba despacio y yo tuve que dejar más distancia de seguridad", relata la persona que grabó el vídeo de la imprudencia que pudo costar vidas.

"Tuvimos suerte de que paro en la cuneta y nosotros paramos y entre otra pareja que paró y yo lo entretuvimos, le quitamos las llaves del coche", explica.

Al parecer , el conductor del vehículo 'kamikaze' se puso "violento" y le tuvieron que devolver las llaves, porque porque incluso llego a intentar agredir a uno de los jóvenes que intervino.

La Guardia Civil se personó en el lugar de los hechos y arrestó al conductor, según los testigos presenciales.