­El Ayuntamiento de Sant Josep anunció ayer que la Demarcación de Costas de Balears ha denegado ocho nuevas autorizaciones de ocupación del dominio público en distintos tramos del litoral de este municipio por parte de personas particulares. Se trata de solicitudes amparadas en la reforma de la Ley de Costas aprobada por el PP que permite que particulares puedan pedir permiso para situar instalaciones en el litoral, tanto para su disfrute personal como para acompañar a negocios ya existentes.

Son solicitudes que se dirigen directamente a la dirección general de Costas, que es la Administración competente para aprobar estas concesiones. Sin embargo, «gracias al acuerdo adoptado entre el delegado insular de Costas, Gabriel Pastor, y el Ayuntamiento de Sant Josep, la demarcación de Costas pide siempre un informe previo al Consistorio y, en caso de ser desfavorable, no se concede el permiso», explicó ayer una nota municipal. «Todos los informes solicitados a este Ayuntamiento en el último año, en relación a la concesión de nuevos permisos han sido desfavorables», añade el Consistorio dirigido por Josep Marí Ribas.

En concreto, las peticiones denegadas por la dirección general de Costas en este municipio afectan a las siguientes playas e instalaciones solicitadas:

€ Cala Bassa: Un quiosco-bar, ocho mesas y 26 sillas.

€ Porroig: Instalación de motos náuticas.

€ Platja d´en Bossa: 37 mesas y 94 sillas (delante de un restaurante).

€ Platja d´en Bossa: nueve mesas y 15 sofás (delante de un restaurante).

€ Platja d´en Bossa: 10 mesas, 40 sillas y cinco parasoles (delante de un restaurante).

€ Platja d´en Bossa: Actividades náuticas, flyboard y canal de embarcaciones a motor.

€ Platja d´en Bossa: cinco sofás, 10 butacas, cinco mesas, 18 mesitas, 10 parasoles, 10 pufs, una pasarela y 10 focos (delante de un restaurante).

€ Es Cavallet: cinco mesas, 20 sillas y cinco parasoles (delante de restaurante).

Las peticiones denegadas no afectan a las que actualmente están autorizadas con anterioridad, entre las que se encuentra, por ejemplo, el conjunto de solariums, hamacas y plataformas de la controvertida vivienda de s´Embarcador, en Platges de Comte. Estos permisos tienen una vigencia máxima de cuatro años.

Todas informadas en contra

Por otra parte, el concejal de Playas de Sant Josep, Pep Cardona, remitió a Costas el pasado 8 de febrero un escrito en el que comunicaba a este organismo que entendiera como informado desfavorablemente por el Ayuntamiento cualquier nueva solicitud de instalación de elementos en las playas de Sant Josep.

«Esta negativa se debe», añade la nota del equipo de gobierno, «a la convicción de que las playas de nuestro litoral ya cuentan con una ocupación más que suficiente, si no excesiva». «Es voluntad del equipo de gobierno no aumentar más la ocupación de un espacio público por parte de empresas o particulares, voluntad que ya quedó patente con la reducción del 10% realizada en los elementos de las concesiones de temporada, hecha a principios de verano», añade el comunicado municipal.