La plataforma que impulsa en Change.org el arquitecto Xavier Llobet para pedir el balizamiento de las praderas de posidonia en el Parque Natural de ses Salines ha dirigido un escrito al conseller de Medio Ambiente del Govern balear, Vicenç Vidal, en el que le pide que aumente la cuantía de las sanciones por esta infracción, tal y como le permite la ley estatal que las regula. Según admitió recientemente la conselleria, las multas que se imponen a los yates que fondean sobre la posidonia protegida suelen ser de carácter leve, con cantidades de 500 euros o menos.

Sin embargo, en el escrito que Xavier Llobet dirige a la conselleria se recuerda que la ley 42/2007 del Patrimonio Natural y Biodiversidad establece en su artículo 80 que «la alteración de las condiciones de un espacio natural protegido mediante ocupación, roturación, corta, arranque u otras acciones» es una infracción que está tipificada como «grave», cuyas multas, según el artículo 81, han de oscilar entre los 3.001 euros y los 200.000.

«Tipificar nuevas sanciones»

Pero, además, Llobet señala que según otra ley, la 26/2007 de Responsabilidad Medioambiental, las comunidades autónomas pueden incrementar la severidad de su acción sancionadora si así lo consideran. «La disposición adicional segunda reconoce expresamente la posibilidad de que las comunidades autónomas, en el ámbito de sus competencias, adopten decisiones más exigentes en materia de prevención, evitación o reparación de daños medioambientales, incluida la potestad de tipificar nuevas infracciones y sanciones», señala el documento remitido al conseller.

Por ello, y en vista de que la zona donde sucede la destrucción de la posidonia es un Parque Natural, declarado además Patrimonio de la Humanidad, y dado que esta especie está también considerada como especie amenazada, el escrito pide que «se expliquen con toda claridad los criterios técnicos seguidos para considerar falta leve, con multa de 300 hasta 3.000 euros, el fondeo de barcos que implican lesiones irreparables a la pradera de posidonia», que además está ubicada en Zona de Especial Conservación de la Red Natura 2000, «y cuya conservación supone una especial responsabilidad del Govern balear», recuerda.

Asimismo, también pregunta «por qué, teniendo constancia de que en el Parque Natural de ses Salines se están produciendo constantemente atentados contra un bien declarado Patrimonio de la Humanidad, considerado en peligro de extinción por la Directiva Hábitats, no se ha utilizado la prerrogativa que otorga la ley estatal para regular el fondeo y para establecer por la Comunitat Autònoma sanciones mayores a las establecidas».

«Destrucción impune»

«La masificación y la presión del fondeo incontrolado de infinidad de embarcaciones de todo tipo, ejercidas sobre las praderas de posidonia en el ámbito del Parque Natural, se vienen denunciando desde el año 2010 sin que los actos punitivos constatados se vean sancionados con la gravedad que la declaración como Patrimonio Mundial debería conllevar, ya que la mayoría de esos actos son considerados como faltas leves», afirma el escrito, que además aprovecha para constatar que esta «desconsideración» hacia la posidonia «se aprecia por la ciudadanía, con toda la razón, como dejadez y despreocupación institucional por la destrucción, prácticamente impune, de un bien declarado Patrimonio de la Humanidad».