María Ángeles Leciñena regresa a la coordinación del servicio de Urgencias del hospital Can Misses, según anunció ayer la gerencia del Área de Salud de Ibiza y Formentera. Leciñena conoce bien el puesto, que ocupó durante años y hasta mediados de febrero de 2012, cuando el anterior responsable del hospital, Ignasi Casas, la destituyó.
Can Misses explica en un comunicado que la última coordinadora del servicio, la doctora Paula Fernández, renunció al puesto. Tras esto, se abrió un proceso de selección al que se presentó Leciñena. De hecho, fuentes del hospital afirman que ella fue al única médico de Urgencias que se presentó al proceso de selección abierto convocado por los responsables del área de salud. Este diario llamó ayer por la tarde reiteradas veces a la nueva coordinadora de Urgencias, que no atendió el teléfono.
Leciñena ocupó ya ayer por la mañana su nuevo cargo, en el que deberá afrontar «importantes retos», apunta la gerencia, que entre ellos destaca «la demora, la mejora de los canales de información a pacientes o dimensionar la plantilla a las necesidades actuales del servicio».
Desde hace meses, tanto los profesionales del hospital, como el portavoz del Sindicato Médico de Balears en Ibiza e incluso la gerencia del área de salud pitiusa han reconocido la necesidad de mejorar las urgencias hospitalarias. Todos ellos, además, han coincidido en apuntar a una «falta de liderazgo» como uno de los motivos por los que el servicio no funciona correctamente. La gerencia confía en que con la nueva coordinadora «la calidad del servicio de Urgencias se sitúe donde se merecen los pacientes». Además, la dirección del hospital agradece «sinceramente» el trabajo realizado durante los últimos meses por Paula Fernández, y, además, ofrece «la máxima colaboración» a la nueva responsable del servicio.
Tras su destitución por parte de la anterior gerencia, María Ángeles Leciñena ha continuado trabajando como médico en el servicio. En aquel momento, febrero de 2012, la entonces consellera balear de Salud, Carmen Castro, se escudó en «temas organizativos» y a la saturación del servicio durante el invierno para apartar a Leciñena del servicio. Desde el PSOE, apuntaron a una «persecución política» como el motivo de la destitución, ya que Leciñena (gerente del área de salud durante una legislatura anterior del Pacte de Progrés) es militante socialista.
Ella misma explicó el día después de su destitución que le habían comunicado que ésta se debía a que la gerencia quería «aires nuevos» y «una organización diferente».
