El Consell Insular de Ibiza, la Pimeef y la Cámara de Comercio pitiusa coincidieron ayer en expresar su «preocupación» por las consecuencias negativas que pueda tener la huelga convocada por el comité de empresa de los trabajadores de tierra (handling) de Iberia en el aeropuerto de Ibiza (ver Diario de Ibiza de ayer).

Todas las entidades consultadas ponen por delante el legítimo derecho de los trabajadores a ir a la huelga, si lo consideran oportuno, pero al mismo tiempo hacen un llamamiento a la responsabilidad para que tanto la empresa como los trabajadores acerquen posturas para evitar que en plena temporada turística el aeropuerto de Ibiza vuelva a ofrecer una imagen deplorable con colas de viajeros esperando y retrasos, tal y como ocurrió con la reciente crisis de la compañía Vueling.

La consellera insular de Movilidad y Territorio, Pepa Marí, manifestó: «Cualquier cosa que pueda afectar al funcionamiento de la temporada turística nos preocupa y más en un momento en que la gente está trabajando no al cien por cien sino al ciento veinte por cien». Tras expresar «el total respeto por las reivindicaciones de los sindicatos», añadió que desde la conselleria de Trabajo del Govern balear «se va a controlar y vigilar para que se cumplan los derechos de los trabajadores para mejorar sus condiciones laborales».

La consellera deseó que las partes «puedan llegar a un acuerdo antes de que haya consecuencias para la economía de la isla».

El presidente de la Petita i Mitjana Empresa de Ibiza y Formentera (Pimeef), Alfonso Rojo, señaló que desde esta patronal ven «mal» este anuncio de huelga. «Desde el respeto a los trabajadores y a sus derechos», añadió, «si esto condiciona nuestra libre actividad en la llegada de los turistas lo vemos con preocupación y malestar».

Rojo indicó que entiende que si «las posturas no se enconan pensamos que [la huelga] puede generar molestias, pero no serán excesivas, pero si el conflicto se alarga no será bueno». Indicó que Ibiza y Formentera no se pueden permitir una mala imagen «con turistas en largas colas en el aeropuerto esperando, esto a nadie le gusta, los turistas vienen a disfrutar y no a soportar una huelga, pensamos que hay mucho tiempo a lo largo del año para arreglar estos problemas y que no sea a finales de julio», concluyó.

El presidente de la Cámara de Comercio de las Pitiusas, Juanma Costa, puso por delante «el respeto al derecho a la huelga y a las legítimas reivindicaciones» de los trabajadores, pero añadió que esperan que se «cumplan los servicios mínimos» y pidió «un ejercicio de responsabilidad a ambas parte para evitar una huelga que afectará al turismo y que producirá una mala imagen, sin contar que se puedan producir cancelaciones de estancias por parte de los turistas». Recordó «el triste y lamentable episodio de Vueling» y señaló que este anuncio de huelga «no es una buena noticia». A su juicio, ambas partes deben negociar porque no cree que «sea oportuno que haya estos paros en época estival, en un conflicto que según los sindicatos no es nuevo».