­La Guardia Civil ha desarticulado una peligrosa organización dedicada al tráfico de drogas, en concreto de hachís, y de personas a nivel internacional en una operación conjunta con la Policía de Alemania y en colaboración con las de Francia, Holanda y Bélgica, que se ha saldado con 29 detenidos, uno de ellos en Ibiza. El arrestado en el isla tenía un papel secundario en la organización. Al parecer, compraba hachís al grupo para venderlo en las Pitiusas. Fue detenido el 21 de junio.

Se trata de la operación Spax, en la que se han intervenido más de una tonelada y media de hachís, dinero, vehículos, ordenadores, teléfonos y abundante documentación muy valiosa para conocer el entramado y las diversas actividades criminales de esta organización. La red también contaba con tecnología para falsificar visados e introducir inmigrantes en Europa. La droga procedía de Melilla y era trasladada en dobles fondos de vehículos hasta Francia, Bélgica, Holanda y Alemania, países donde triplicaba su precio. La ´guardería´ de la misma estaba en Málaga y los dobles fondos de los vehículos se realizaban en Madrid, informa la Guardia Civil.

La operación se inició mediante el análisis de información compartida con la Policía alemana sobre frecuentes aprehensiones de droga en dobles fondos de vehículos, cuidadosamente fabricados para impedir su detección.

Las investigaciones permitieron localizar dos pisos en la localidad de Arroyo de la Miel (Málaga) utilizados para guardar droga, que contaban con fuertes medidas de seguridad y estaban vigiladas por dos personas de forma permanente, armados con una pistola con munición para evitar el robo por parte de otras organizaciones.

Desde Málaga la droga la distribuían en vehículos vía Madrid y Barcelona y desde allí a Francia y demás países destinatarios. En el transcurso de la operación han sido intervenidos 16 vehículos ´mula´, seis de ellos en España. En Madrid vivía uno de los líderes de la organización. Otra rama del grupo también se asentaba en Barcelona.