Los retrasos y las cancelaciones en los vuelos con origen o destino a Ibiza que opera Vueling se están convirtiendo en la tónica habitual, lo que ha suscitado multitud de quejas y reclamaciones por parte de los usuarios afectados este fin de semana. La jornada de ayer tampoco transcurrió con normalidad para esta compañía, ya que en la página web de AENA y de la propia aerolínea se informaba de la cancelación del vuelo VY3524, que cubría el trayecto Barcelona-Ibiza, cuya hora programada era las 8.40 horas, así como de retrasos en la mayoría de sus conexiones.

Uno de los ibicencos afectados por los retrasos de Vueling fue Joan Roig, un joven de Santa Eulària que estudia en la ciudad condal. Su vuelo VY3518 estaba programado para el día 26 a las 19.45 horas, pero su avión no despegó hasta las 7.45 horas del día siguiente, es decir, 12 horas después. A pesar de esta impuntualidad, Roig explicó que la aerolínea no le ofreció información sobre el retraso, sino todo lo contrario: «La situación era caótica, ya que el personal de Vueling que nos atendía en El Prat tenía menos información que nosotros», criticó este universitario. Además, añadió que cada dos horas le aseguraban que podrían reubicarle en otro vuelo. «¡Me mandaron a 10 puertas de embarque diferentes e incluso querían reubicarme en un avión que volaba a Málaga! Fue un auténtico caos».

Más corta fue la espera de Juan Martos. El despegue de su vuelo Ibiza-Málaga, el VY2457, estaba previsto a las 12.30 horas, pero salió dos horas más tarde. «A causa de este retraso yo no he podido ir a trabajar», criticó Martos, que pasó cinco días de vacaciones en la isla.

Asimismo, agregó que este mes ha volado con Vueling tres veces y que no ha llegado a la hora prevista ninguna de ellas. «Nos sorprende que los problemas con esta aerolínea sólo aparezcan en medios locales cuando está afectando a todo el país», se quejó este afectado.