El acuerdo adoptado la semana pasada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), mediante el que solo se permite a Telefónica mantener la exclusividad de la fibra óptica en 66 ciudades -entre las que no se encuentra Ibiza- amenaza con suspender el despliegue de este sistema de comunicación telemática al resto de la isla.

El acuerdo de la CNMC, organismo público adscrito al Ministerio de Economía y que tiene por objeto velar por la correcta competencia empresarial, obliga a Telefónica a compartir su propia red de fibra con sus competidores en todo el Estado, excepto en 66 ciudades, que son aquellas en las que, a juicio de la Comisión, hay suficiente competencia de oferta de conectividad de más de 30 Megabytes. Entre esas ciudades no figura Ibiza ni ninguna otra de Balears.

Un portavoz oficial de Teléfonica confirmó ayer a este diario que esta situación perjudica enormemente a la empresa, entre otras cosas porque otras compañías podrían aprovechar las infraestructuras que está construyendo Telefónica. «Se está favoreciendo a quien no invierte ni un solo euro [en alusión a las demás empresas del sector] y se perjudica a quien se está preocupando de llevar la fibra óptica y la revolución digital a cada rincón de las islas», manifestó este portavoz.

«El caso de la isla de Ibiza es especialmente claro. Estamos haciendo un despliegue muy caro y de mucha capilarización, ya que va a llegar a casi todos los municipios y a todos los polígonos industriales. Somos el único operador que se ha planteado este esfuerzo inversor», añadió.

«Suspender el despliegue»

Como consecuencia de la situación creada, «se está valorando suspender la siguiente fase del despliegue, a la espera de que se establezcan los precios regulados que tiene que fijar la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia», única solución en la que se confía para que Telefónica mantenga sus planes iniciales.

Telefónica «se está replanteando la inversión en Ibiza», dado que la empresa, pese a que «siempre ha apostado por Balears», tiene la obligación de invertir allí donde pueda esperar mayor rentabilidad.

«Además, tenemos unos accionistas a los que hay que rendir cuentas», añadió el mismo portavoz.

Telefónica tenía previsto, antes de que se produjera el acuerdo de la CNMC, dar cobertura a 75.900 inmuebles en la isla de Ibiza. La primera fase incluía el municipio de Ibiza, el de Santa Eulària y el de Sant Josep, mientras que la segunda abarcaba el resto.

Hace apenas dos semanas, la directora comercial de la empresa, Arantxa Doncel, detallaba en una conferencia en la sede de la Petita i Mitjana Empresa los planes de despliegue en la isla, y justo al cabo de pocos días se conoció la regulación aprobada por la CNMC.

En toda la isla, el lugar donde la implantación de la fibra óptica -que sustituye a las redes de cobre convencionales- está muy consolidada en Vila y se estaba empezando a instalar en Santa Eulària y en Sant Josep.