El pleno del Parlament aprobó ayer modificar la actual ley balear de protección animal, de 1992, para prohibir todos los espectáculos taurinos en las islas, así como «cualquier forma de fomento y protección a través de subvenciones, inversiones, beneficios fiscales y cualquier otra forma de financiación pública a los espectáculos taurinos». La iniciativa, presentada conjuntamente por los partidos del Pacto, salió adelante con sus votos, mientras que PP y Ciudadanos mostraron su frontal rechazo y El Pi, que apoyó el punto a favor de la defensa de los derechos de los animales, se abstuvo en lo que se refiere a la tauromaquia.

La propuesta, además, incluye prohibir «cualquier espectáculo que cause sufrimientos a un animal» e insta al Gobierno central a «abolir todas las ayudas públicas» a la tauromaquia y eliminar la declaración de Bien de Interés Cultural o Bien de Interés Turístico para todos los espectáculos en los que se maltraten animales. Asimismo pide al Gobierno central que adopte medidas de protección de la infancia de acuerdo con «el comité de los derechos de los niños de Naciones Unidas, que insta a alejar a los menores de edad de la violencia de la tauromaquia».

Al debate asistieron representantes de Mallorca Sense Sang, impulsora de la movilización para esta iniciativa, y representantes de la Fundación del Toro de Lidia, defensores de la tauromaquia. Los representantes del Pacto plantearon el debate como una cuestión «ética», mientras que desde el PP y Ciudadanos apelaron a la «libertad» de acudir a unos espectáculos que, según defendieron, forman parte de la cultura de España, incluida Balears. v. e. palma