­El alcalde de Sant Josep y vicesecretario general de la Federación Socialista de Eivissa (FSE), Josep Marí Ribas, Agustinet, pone reparos a la posibilidad de que el nuevo Plan Territorial Insular (PTI) impida edificar viviendas en suelo rústico y asegura «no tener constancia» de que su partido lo haya pactado con Podemos. El acuerdo de gobierno del Consell entre el PSOE y Podemos contempla que se tiene que «evitar la urbanización difusa del suelo rústico... en el que solo se permitirán las actividades e instalaciones que le sean propias o aquellas con un evidente interés general».

Mientras la vicepresidenta primera del Consell, Viviana de Sans, de Podemos, considera que, «en principio, no se deberían construir más viviendas en suelo rústico», y que el texto del acuerdo alcanzado es «bastante claro», el alcalde de Sant Josep asegura que las condiciones para construir en el campo están «bastante definidas hasta ahora» y que en el caso de que se quisiera cambiar, se tendría que «hablar».

Así como considera que la propuesta de declarar inedificables las Áreas Naturales de Especial Interés (ANEI) y las zonas protegidas de la Red Natura 2000 (LIC y ZEPA) «tiene una justificación medioambiental», en el caso del suelo rústico Marí Ribas asegura: «No sé si soy partidario de moverlo como está». «Habría que ver qué propuestas se hacen. No se ha abierto este debate en el Ayuntamiento ni en el partido, que yo sepa. Estaré a la expectativa. Aceptaré los acuerdos que se hayan adoptado, pero de este tema del suelo rústico no había oído nada».

De Sans defiende que el acuerdo alcanzado con los socialistas implica que la revisión del PTI se encamine hacia «el crecimiento cero». Marí Ribas admite que la isla está «bastante saturada» y que existe una conciencia ciudadana de que se ha llegado a «un tope», pero a su vez cuestiona qué significa crecimiento cero: «Si se refiere a que no se desarrollen nuevos urbanizables, a lo mejor podemos llegar a estar de acuerdo; pero si se trata de decir que no se darán más licencias a nadie, habrá que hablarlo, porque aún hay muchos suelos urbanos por desarrollar».

En todo caso, como el grupo del PSOE en el Consell no ha manifestado su opinión sobre este asunto, el alcalde prefiere quedarse «al margen»: «El Consell ya se aclarará. No quiero pronunciarme. Se tendrá que hablar», insiste.

Revisión de las áreas protegidas

Marí Ribas sí considera razonable que se impida edificar en los espacios naturales protegidos, como las ANEI. «No me parece mal», asegura, aunque acto seguido puntualiza que en el caso de su municipio se debería «revisar» qué espacios cumplen con la definición de lo que debe ser una ANEI. Se refiere por ejemplo a la zona de Benimussa, que, según él, reúne las características de una Área Rural de Interés Paisajístico (ARIP), «pero no de ANEI». «Si se definen bien lo que son las ANEI, bosques consolidados que no son cultivables, entre otras características, efectivamente han de ser inedificables porque este es su espíritu», afirma.

Por su parte, el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, del PP, recuerda que «no es fácil» construir en ANEI porque se tienen que dar unas condiciones determinadas: aparte de la parcela mínima de 50.000 metros cuadrados, no se puede edificar en zonas boscosas con cierta pendiente, explica. A su entender, no existe suficiente presión para declarar inedificables estos espacios naturales, y menos aún el suelo rústico.

Vicent Marí considera que la propuesta de «crecimiento cero» es «un engaño y una estafa» porque el PSOE «no lo llevaba en su programa electoral». «No veo la necesidad de abrir este debate», resalta, al tiempo que argumenta que «se perjudicaría a personas que no se lo merecen, la gente de Ibiza que ha conservado el campo». En este sentido, el alcalde del PP apunta que la división de la tierra para donarla en herencia a los hijos es «una costumbre y un signo de identidad de Ibiza».