Luis García Santander envió una carta al director de Diario de Ibiza que ha removido conciencias. Después de 32 años veraneando en la isla este vallisoletano empleado de banca que ha dedicado también buena parte de su vida a la enseñanza, anunciaba que no volverá por la degradación de la isla.

- La carta al director que se publicó con el título ´Adiós Ibiza, adiós´ causó un gran impacto. Fue el contenido de la web más leído en su momento y ha sido compartida en Facebook más de 2.000 veces. ¿Por qué cree que ha tenido esta repercusión?

- Los ibicencos saben perfectamente lo que está ocurriendo en su entorno, sobre todo en verano. Los acontecimientos acaecidos en la isla en los últimos cinco años son horrorosos para sus intereses y representa para ellos un agobio y un cambio espectacular en sus costumbres y en su forma de vida. A los arraigados a esta tierra no les gustan estas masificaciones, estas calas convertidas en clubes, estas autovías con infinidad de rotondas, estos precios desmesurados para cualquier actividad de su ocio. No les gusta pagar por dejar el coche cuando van a la playa, ni que en sus calas preferidas ya no puedan estar. Observan con indignación que proliferan los negocios sin licencia, que van desapareciendo poco a poco sus pequeños negocios familiares. Resumiendo, van perdiendo calidad de vida y observan con verdadera preocupación lo que en un futuro esto les deparará.

- Usted y su familia veraneaban en la isla desde hace 32 años y ahora anuncian que dejan Ibiza en busca de un lugar de vacaciones menos masificado, menos caro, menos urbanizado, menos explotado, en suma. ¿Les ha dolido tener que tomar esta decisión?

- Veraneamos en la isla desde el año 1983. Al principio lo hacíamos en familia, el matrimonio con cuatro hijos. Después, cuando los hijos fueron mayores, veníamos a veces con varios de ellos, incluso con la nieta, que ya conoce Ibiza, o con otros familiares. Otras veces, vinimos sin los hijos, ya que, lógicamente cada uno tiene sus obligaciones. Pero nosotros, el matrimonio, cada año venimos a pasar aquí las vacaciones, desde dicha fecha. Desde aquí queremos agradecer a la familia Prats, propietarios del hotel Vedrá en Sant Antoni, la acogida que durante todos estos años nos ha dado, haciéndonos sentir como parte de su familia. Y queremos hacer un homenaje póstumo a su fundador, don Mariano Prats, recientemente fallecido, ibicenco ´de pro´ luchador infatigable de los derechos de los nativos e incansable defensor de sus intereses. Rosa, mi esposa, está especialmente enganchada a estos aires ibicencos, tanto es así, que aunque solemos viajar mucho, sólo se baña en estas aguas. Aquí nos sentíamos muy a gusto, tenemos amistades y nos identificamos con esta tierra. Para ella el no visitar la isla será un verdadero trauma, siempre trata de dulcificar todos estos desmanes y sé que ella, a pesar de los pesares, volvería.

- En 2006 en una entrevista con Diario de Ibiza su mujer y usted decían: «no hay otro destino posible para ir de vacaciones», a pesar de que la isla ya se había urbanizado en exceso, a pesar del ruido y de algunas cosas que no les gustaban mucho de la isla. ¿Qué les ha hecho cambiar radicalmente de opinión?

- Y así lo vivíamos, estábamos en contra de algunas iniciativas que se tomaban en la isla, pero nuestro amor por ella disipaba cualquier idea de abandonarla. Pero es que desde ese año [2006], hasta la fecha, han sucedido cosas lo suficientemente graves para que sintamos que esto ya no es, ni parecido, a lo que vivimos. Este año, el primer día, fuimos a Cala Bassa. Además de la odisea para dejar el coche, llegamos a la playa y no había sitio material para extender la toalla. Fue tan grande la sorpresa que, inmediatamente, mi esposa Rosa me expresó su intención de irse de la playa. ¿Han visto la cantidad de tumbonas y camas balinesas que proliferan en esa cala? Me pregunto si todas tienen la licencia adecuada o el cupo establecido por ley. ¿Han observado la parte del pinar en esa cala? ¿Es todo esto legal? ¿Recuerdan ustedes cuando los domingos se llenaba de residentes, con su familia para comer en la zona de pinos? Por favor, no dejéis que ocurra lo mismo con Platges de Comte, ya que los terrenos parece ser que están vendidos a una empresa inglesa.

- ¿Cree que hay más calas en peligro?

- Sí, cuidado con Cala Pinet, parece ser que allí algo se está ´cociendo´. Estad atentos. Existe una voluntad de privatizar parte del litoral de la isla. Son añoranzas, son tiempos que no se repetirán, son cotos cerrados. Yo decía en otra carta «en Eivissa se están poniendo puertas al mar». En Cala Bassa un verano apareció la carretera llena de rocas. Se argumentaba que era por la Ley de Costas y me pregunto dónde estaban estas leyes cuando se construían hoteles y urbanizaciones en Port de Torrent, Cala Tarida, Cala Vadella, etc. Yo escribí cartas infructuosas al regidor del municipio de Sant Josep pidiendo explicaciones, sin resultado alguno. Seguro que en Castilla, donde resido, no se hubieran consentido tales tropelías, porque los ciudadanos tienen la obligación de defender lo suyo.

- En este sentido, en la carta, y también en otras anteriores publicadas en Diario de Ibiza se dirige directamente a la población de Ibiza, instándoles a reaccionar. ¿Cree que hay un cierto inmovilismo por parte de los ibicencos con respecto a la degradación de la isla?

- Me tienen que perdonar, pero lo hacía para que reaccionaran sobre lo que creíamos que se les venía encima. Ya en el 2009 les advertía, les decía que se unieran, que si veían algo negativo para sus intereses, lo expresaran, que no votaran a los políticos que consentían o adjudicaban licencias que fueran en contra de los intereses de los ciudadanos. En alguna de mis cartas decía: «Admiro la paciencia de los residentes y me horrorizo de la permisibilidad de los políticos, que con su consentimiento eluden su responsabilidad de atender el bienestar de sus administrados». «Por favor echad a los políticos de sus puestos si no toman las medidas adecuadas, porque si vivís fundamentalmente del turismo, ellos cobrarán de vuestros impuestos, y la mayoría de vosotros iréis al paro». «Debéis averiguar qué pasa, y por qué se toman ciertas decisiones. Y si no tenéis respuestas, con vuestros votos, mandadles a casa».

- Pero ha sido la última la que más repercusión ha tenido por ese ´adiós´.

- La última carta al director de este periódico, al que desde aquí le agradezco su iniciativa al dejar a los lectores expresar sus sentimientos, como siempre lo ha hecho cuando le he enviado un escrito, por fin ha servido para que, de una forma masiva, los ibicencos se hayan visto identificados con todo lo que en ella exponía. Esto me llena de satisfacción y de alegría, esperando que en un futuro dé sus frutos.

- ¿Cuáles son, a su juicio, las claves de la degradación?

- Fundamentalmente la masificación descontrolada. Si habéis observado este año o se han concedido demasiadas licencias para abrir establecimientos o han proliferado negocios sin licencia. Cualquiera de las dos cosas son negativas para la isla. Sin un cálculo adecuado se han abierto establecimientos en zonas masificadas, lo cual es un caos total. Por ejemplo Platja d´en Bossa es un total desmadre.

- ¿Quiénes son los responsables?

- Sin duda alguna, los políticos. Ten en cuenta la corrupción generalizada que existe en nuestro país. ´Poderoso caballero es don dinero´, es una frase que expresa parte de lo sucedido en la isla. Todo esto con la anuencia de los ibicencos, que no han sabido o podido hacer frente a situaciones esperpénticas y que ahora sufren sus consecuencias.

- ¿Cree que la situación es todavía reversible si hay una reacción?

- A corto plazo, es muy difícil que todo esto tenga un retorno digno y eficaz. A largo plazo, hay que decrecer, hay que tomar medidas ejemplarizantes, implicarse en los problemas, estudiar la situación a fondo y hacer un programa de actuaciones para ir recortando todo lo que se ha hecho mal durante todo este tiempo. Debe ser una labor coordinada entre la Administración y los ciudadanos. Éstos tienen que implicarse a fondo.

- ¿En qué lugar piensan para sus próximas vacaciones?

- Queremos conocer Menorca, ver cómo son sus gentes y advertir si tiene las condiciones turísticas adecuadas para satisfacer nuestras expectativas.

- ¿Qué es y qué persigue la página que ha creado en Facebook ´Ibiza es nuestra´?

- Queremos que a través de la página, los ibicencos expresen su voluntad de implicación a una causa que no tienen perdida, pero que la tienen que recuperar. Que sea un foro de unidad y de entendimiento, para que de él salgan las ideas suficientes para poder cambiar lo que se considere negativo e inapropiado para la isla. En ella seré un mero espectador o un interlocutor válido, para lo que estimen conveniente. Desde aquí nuestro agradecimiento a todos los ibicencos por su cordial acogida durante tantos años. Y en la confianza de una futura isla renovada, nos despedimos de todos y hasta siempre, amigos.