El alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, Agustinet, no ha tomado aún una decisión acerca de la renuncia del jefe de Policía Local, Jaume Ramón. El subinspector puso su cargo a disposición del Ayuntamiento a raíz de la determinación que adoptó el pasado martes por la tarde de dejar en libertad a un vendedor ambulante detenido por sus propios agentes con el fin de «evitar alteraciones graves del orden público» por parte de un grupo de unos 20 0 30 senegaleses que acudieron a pedir la libertad de su compañero al retén policial y al Ayuntamiento. Los vendedores «irrumpieron gravemente el orden del edificio», según consta en el atestado policial. «El alcalde decidirá la próxima semana si acepta o no la renuncia del jefe de Policía», informaron ayer desde la Alcaldía.

El subinspector Jaume Ramón lleva más de 20 años al frente de la Policía Local de Sant Josep. El alcalde cree que la decisión que tomó su jefe de policía fue «equivocada» y ahora analiza la situación para decidir si acepta o no su renuncia. «El jefe [Jaume Ramón] entiende que la actuación que tomó ayer no fue la correcta y nos ha presentado su renuncia (...) Nosotros entendemos que es un acto que le honra, porque lo que pasó ayer por la tarde da una imagen que no es la correcta», señaló por su parte la concejala de Gobernación, Paquita Ribas.

Nueva declaración

La Guardia Civil de Sant Antoni acudió el jueves a la playa de ses Salines para buscar a este vendedor ambulante. Los agentes preguntaron por él a varios compañeros y el vendedor, C.I., se presentó ante ellos. Le condujeron al cuartel, le tomaron declaración y quedó en libertad con cargos, pendiente de que el juzgado lo llame por una acusación de resistencia grave activa que le imputan los agentes locales que le arrestaron el martes por la mañana.

Por otra parte, varios vendedores ambulantes acudieron ayer por la mañana al Ayuntamiento de Sant Josep para intentar entrevistarse con el alcalde, ya que el jueves lo intentaron pero no lo consiguieron porque Agustinet estaba reunido con un grupo de vecinos.

Ayer por la mañana tampoco les recibió, pero entregaron una carta que un funcionario les selló con en el registro de entrada. «Los senegaleses no queremos que perjudiquen al jefe de policía», dice la carta.

Insultos «racistas»

«Nosotros [el martes]subimos a pedir una explicación (...) Queremos que nos traten bien y que no nos peguen ni nos insulten de forma racista. (...) Esta vez hemos subido [al Ayuntamiento] por los malos tratos de un policía cuando lo han detenido. (...) El jefe no tiene culpa, ya que en todo momento no nos dijo que solo podía poner en libertad a nuestro amigo el policía que lo detuvo», se puede leer en la carta entregada en el Consistorio de Sant Josep por uno de los senegaleses en representación de esta parte del colectivo de vendedores ambulante.