­El presidente del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat, anunció el lunes que la incineradora de Son Reus dejará de quemar residuos procedentes de Italia e Irlanda y añadió que, en su lugar, los recibirá de Ibiza y Menorca, algo que, sin embargo, en la conselleria de Medio Ambiente ibicenca no tienen tan claro. «La filosofía de incinerar los residuos es siempre la última opción para nosotros», declaró al respecto el conseller de Medio Ambiente de Ibiza, Miquel Vericad.

No obstante, según la normativa europea, Ibiza y el resto de islas de Balears tienen 2018 como fecha límite para suprimir sus vertederos, en el caso pitiuso el de Ca na Putxa. En caso contrario, podrían peligrar las ayudas de carácter medioambiental que Bruselas concede a las islas.

«La política del Consell de Ibiza, que está marcada en nuestro programa político conjunto (PSOE y Podemos-Guanyem), busca una reducción sustancial de residuos en origen, desde el momento en que surgen de nuestras casas o de las industrias donde se generan y, en principio no está contemplado el envío de residuos a la incineradora de Son Reus», manifestó Vericad acerca del anuncio realizado por el presidente del Consell de Mallorca.

«Todos sabemos que en Mallorca [la incineradora de Son Reus] ha tenido una fuerte contestación social debido a la importación de residuos de Italia por culpa de una instalación sobredimensionada y una gestión de residuos que no ha sido aceptada [por la mayoría de la isla]», añadió el conseller ibicenco.

«Para que esta gran incineradora sea rentable», insistió Vericad, «necesita de la importación de estos residuos, que vienen de un lugar [Italia] donde la gestión de residuos está muy mediatizada por las mafias y que podrían ser restos de carácter industrial o peligrosos». «Nuestra filosofía de trabajo en principio no está encaminada a la incineración de residuos», concluyó.

Pagar el transporte

Por otra parte, Ensenyat explicó ayer que el Estado está obligado a pagar el transporte marítimo de los residuos entre las islas, de forma que el coste de la operación de traslado de las basuras hasta la incineradora de Son Reus se reduciría de forma considerable. El presidente del Consell de Mallorca también anunció ayer que ha convocado una reunión con sus homólogos de las otras islas para intentar abordar de una forma conjunta el problema de las basuras.