­El interés de Pepita Gutiérrez en optar de nuevo a ser la candidata a la alcaldía parece que no tendrá mucho recorrido. Pese a que la fricción entre los dos sectores del partido se focaliza ahora mismo en Sant Antoni, no hay apenas debate en la ejecutiva local, que apuesta por que el senador José Sala regrese a la política local y sea el cabeza de lista. Y Sala, que además, es el presidente del comité electoral (el órgano que debe decidir quién es la mejor opción), está casi convencido de que ha llegado el momento de intentar iniciar una segunda etapa en el Consistorio.

Sala ha pedido un margen hasta final de mes para dar el sí definitivo. Durante los días que quedan hasta entonces, el presidente del comité electoral tratará de buscar una salida «digna», según las fuentes consultadas, a la alcaldesa. De hecho, varios dirigentes del partido aseguran estar «sorprendidos» por la decisión de Gutiérrez de comunicar la semana pasada al comité electoral su intención de repetir como candidata a la alcaldía, cuando sabía de sobras que este órgano trabaja en otras opciones (principalmente la de Sala) por la escasa aceptación de la actual alcaldesa entre las filas populares.

No hay vuelta atrás. Y Pepita Gutiérrez, pese al apoyo mostrado inicialmente por el presidente insular, Vicent Serra, tiene enfrente un muro que impedirá que repita como candidata. Sala ya ha dado el paso públicamente al manifestar que no descarta la posibilidad de ser el candidato. El ahora senador dejó en su día el Consistorio, tras ocho años de gobierno, con la intención de dar el salto al Consell, pero la decisión del presidente regional del PP, José Ramón Bauzá, de impedir que las personas imputadas fueran en las listas electorales de 2011 truncaron sus planes y cambiaron la historia del PP de Ibiza. Tras retirarse su imputación por el caso de ses Variades, Sala fue elegido senador, pero, al parecer, él prefiere asumir una responsabilidad política de gestión.

El plan ´B´ de Sant Antoni

En el caso de que Sala desechara la opción de retornar al Ayuntamiento (diversas fuentes próximas al senador apuntan que tendría que dar un vuelco muy grande la situación), el comité electoral baraja otras opciones: la consellera Pepa Costa y el tercer teniente de alcalde y concejal de Hacienda y Turismo, Vicent Ribas, Mestret. Costa y Ribas también apuestan por la candidatura de Sala, pero se mantienen como un posible plan ´B´ en el caso de que se tuerzan las cosas, con lo que, en cierta manera, queda garantizado que habrá una candidatura alternativa a la de Gutiérrez, la única por ahora que oficialmente ha comunicado su intención al comité electoral.

En todo caso, las fuentes consultadas apuntan que no creen que finalmente sea necesario que el comité electoral tenga que elegir entre más de un aspirante porque Sala convencerá a Gutiérrez para que dé un paso atrás. Precisamente, la alcaldesa dejó abierta la posibilidad de retirar su candidatura en el caso de que finalmente Sala quisiera encabezar la lista municipal. «Todo es posible en política», dijo Gutiérrez, quien, no obstante, pese a saber que no tiene ninguna opción de ser elegida por el comité electoral, agregó: «Que haya dos o tres candidatos no es algo que sea malo, ni sería diferente de lo que pasó en el último congreso insular. Es bueno que haya diversidad de opiniones y candidatos».

Los dirigentes consultados por este periódico no lo ven así y consideran, en clave interna, que sería un error puesto que una votación del comité electoral supondría que hubiera un ganador y un perdedor, que, en cierta manera, quedaría desautorizado por su propio partido. No hay que obviar, además, que Gutiérrez es la secretaria general del PP insular, la número 2 de la formación. Serra premió a Gutiérrez con la secretaría general por su apoyo en el congreso insular de hace dos años. También le apoyó el concejal de Urbanismo, José Torres, pero el resto de miembros del equipo de gobierno se inclinó del lado de Sala.