La temporada de invierno en la isla de Ibiza volverá a pasar sin pena ni gloria, debido a la ausencia de programas turísticos al margen del Imserso y por la tradicional falta de enlaces aéreos con las principales capitales europeas. Los viajes de la tercera edad a la isla mantendrán abiertos solo nueve hoteles, un número parecido a la temporada anterior, y la cantidad de turistas que llegarán dentro de este programa será de unos 40.000, cifra también casi igual a la del año anterior.
Según confirmaron fuentes de la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif), hasta finales de noviembre solo quedarán abiertos tres hoteles en la zona de Sant Antoni y su bahía: Invisa Es Pla, Azuline Bergantín y Sol Pinet Playa, mientras que en Santa Eulària permanecerán en funcionamiento el Imvisa La Cala, Tres Torres e Invisa Ereso, este último en es Canar.
Diciembre y enero serán los meses en que más baja sea la oferta hotelera para el turismo de invierno, ya que en toda la isla solo quedará abierto el hotel Tres Torres de Santa Eulària.
Como todos los años, será a partir de febrero cuando se reactive la temporada del Imserso, cuando al Tres Torres volverán a sumarse los demás hoteles citados, así como el Intertur Miami, Azuline Atlantic y Panorama Marina, todos ellos en es Canar.
Desde esta semana
La isla de Ibiza empezó a recibir esta semana los 40.400 turistas del Imserso que han sido asignados a las Pitiusas este invierno por el Ministerio de Sanidad y Asuntos Sociales, si bien esta cifra puede sufrir variaciones conforme avance la temporada en función de la demanda.
El Imserso enviará a Balears un total de 181.000 turistas de la tercera edad, que es exactamente el mismo contingente que el año pasado.
La Fehif considera que el turismo del Imserso ayuda a mantener operativos los servicios de los hoteles, pero sobre todo supone un apoyo para la oferta complementaria, dado que se trata de una clientela que frecuenta restaurantes y cafeterías situadas en el entorno de los establecimientos.
Sin embargo, los hoteleros consideran necesario aumentar los precios que se cobran, al objeto de garantizar un mínimo de rentabilidad al empresario durante los meses de invierno. El turismo del Imserso no resulta rentable a establecimientos de pequeño tamaño, motivo por el cual los hoteles que abren para los mayores de 65 años suelen ser de gran tamaño.
Desde hace dos años han desaparecido los programas de invierno que se impulsaban tanto desde la Unión Europea como desde el Govern balear. La Comunitat Autònoma mantiene suprimido el Pla Oci para los mayores, debido a los recortes presupuestarios.
