El presidente José Ramón Bauzá justificó ayer su decisión de destituir a Joana Maria Camps al frente de Educación en la necesidad de «cambiar la dinámica» de esta conselleria, a la vez que dejó claro que no dará marcha atrás con el TIL a pesar de la anulación por parte del TSJB. Sostuvo que, aunque el TSJB haya ordenado la suspensión de la aplicación del TIL este curso, el Tribunal ha adoptado esta decisión de forma cautelar, pero «no ha dicho que sea ilegal» aplicarlo. Según Bauzá, su Govern «siempre cumple la ley», por lo que no hay riesgo de incurrir en un delito de desobediencia ya que actúa en todo momento «siguiendo el criterio de la Abogacía de la Comunidad».

El presidente insistió en todo momento en que la decisión de recurrir tanto la sentencia del TSJB como la suspensión de la aplicación del decreto de trilingüismo se adoptó apoyándose en la opinión de la Abogacía de la Comunitat. «Recurrir no es ilegal, recurrir no es prepotente, recurrir no es desacatar la ley, es utilizar todas las herramientas legales que nos da la ley», declaró el jefe del Ejecutivo balear para quien «no hay ningún vacío legal» en lo que se refiere al TIL.

A pesar de esta defensa cerrada del decreto de trilingüismo, su argumento sobre la necesidad de «cambiar la dinámica» de la conselleria reflejaba que es consciente de la gravedad del conflicto. Durante la toma de posesión de Núria Riera y de Juan Manuel Lafuente, Bauzá emplazó a ambos, pero refiriéndose claramente a Riera, a «apostar por el diálogo y el consenso». «Nos toca trabajar para mejorar la situación de la educación desde el diálogo, el consenso y la responsabilidad de aplicar un proyecto con el que nos comprometimos y en el que todos creemos, que es la educación trilingüe y competitiva», declaró. Por ello, pidió a los consellers «esfuerzo, valentía, responsabilidad y compromiso con el proyecto que eligieron los ciudadanos cuando depositaron su confianza en el Govern y una apuesta por el diálogo y el consenso».