PSOE-Pacte de Sant Josep criticó ayer en una nota «el insuficiente» proyecto de mejora de la carretera PM-801 a su paso por Sant Jordi. El portavoz del grupo de la oposición, Josep Marí Ribas, Agustinet, registró el 28 de agosto diez alegaciones en una carta remitida al presidente del Consell de Ibiza. En ellas critica en primer lugar no haber podido conocer antes los detalles de las obras, a pesar de ser concejal del Ayuntamiento.

Los progresistas creen que la reforma, con un presupuesto de 239.000 euros, se limita a la colocación de un nuevo pavimento, que ahora mismo no está mal, a la construcción de pasos de peatones elevados y a mejorar la señalización horizontal y vertical. «No se soluciona el problema de la salida a la calle principal, con visibilidad muy mala desde algunos lugares, como el bar Can Tixedó», explica Marí Ribas en la carta.

Otro problema, que PSOE-Pacte cree que se debería abordar como «un tema de interés general», es la dificultad que sufren los vecinos de Sant Jordi para acudir a la oficina de Correos, que desde que se construyó la autopista quedó ubicada en la calle Polls, en la parte alta de Platja d´en Bossa. «Tiene difícil acceso, ha quedado totalmente desplazada», critica Marí Ribas. El proyecto de la autovía incorporaba accesos desde el antiguo Camí Vell de Sant Jordi, que no se han ejecutado, según recuerda ahora la oposición.

Los progresistas creen que la futura reforma de la carretera a su paso por Sant Jordi debería aportar «características urbanas» a las calles del pueblo. Además, recuerdan que la construcción de la autovía del aeropuerto por debajo de la cota cero, «en trinchera», generó un problema de embalsamientos de agua cuando llueve.

Rejas de 50 centímetros

«El proyecto que pretende ejecutar [el Consell] no aporta soluciones, se limita a destinar unas pequeñas partidas para ampliar los imbornales de recogida de agua al final de la calle des Fumarell y en la rotonda de la motonáutica, y otra al final de la calle en la que está el centro comercial Can Mariano Palerm», explica Marí Ribas en la nota. El exalcalde de Sant Josep considera que incrementar el tamaño de las rejas de los imbornales de 30 a 50 centímetros no solucionará el problema de las inundaciones. La oposición espera que se tengan en cuenta sus alegaciones para que se construyan canalizaciones nuevas y se mejore la recogida y evacuación de las aguas pluviales y la red de saneamiento y abastecimiento.

«Es una vergüenza que el Ayuntamiento de Sant Josep no haya tratado este proyecto con seriedad», critica Ribas, que pedirá explicaciones en el próximo pleno del Consistorio.