Formentera tiene una superficie de 83,2 kilómetros cuadrados y el barrio neoyorkino de Manhattan 87,46. Son dos islas de casi el mismo tamaño, pero si la primera apenas tiene 11.000 habitantes, la segunda suma 1,6 millones. ¿Es posible imaginar a 1,6 millones de personas viviendo en Formentera o a 11.000 en todo Manhattan?

Denise Leichter, nacida en Frankfurt en 1968 y residente en Formentera desde hace 20 años, se quedó fascinada al conocer, a través de un amigo, que las dos islas tienen casi exactamente el mismo tamaño. Parece imposible. Dos polos opuestos en apariencia pero con más similitudes de las que podría parecer. «Me fascinó la idea de las miles de maneras que tiene el ser humano de desarrollar la vida, desde la arquitectura hasta la vida social, dentro de este marco literal que es la isla», explica.

En enero de este año empezó a comparar fotos que había tomado en ambos lugares y comprobó que esa idea de contraste/similitud podría funcionar como proyecto fotográfico. Compuso la primera pareja de imágenes y con eso dio con la clave de su proyecto (Formenhattan.com).

Con ganas de volver a NYC

Al contrario de lo que podría parecer, a Leichter no le está resultando muy difícil encontrar estos paralelismos. «Desde que empecé el proyecto me siento como si hubiese encontrado una fuente que no deja de brotar, así que me resulta bastante fácil», dice. Además, todas las fotos de Nueva York las tomó antes de comenzar la idea del blog con lo que cuando regrese le será «mucho más fácil» continuarlo. «Tengo un montón de ideas, de motivos que quiero captar y unas ganas locas de pasearme por las calles de Manhattan haciendo fotos con Formenhattan en la mente», añade. Ya ha planificado pasar tres meses en Manhattan este otoño-invierno y volver cargada de fotos e ideas para su proyecto.

Leichter no cree que las imágenes que ha tomado y comparado muestren simplemente un contraste. «Es más que eso, porque pienso que justamente a través de nuestras diferencias encontramos nuestras similitudes. Lo diferente no es tan diferente como a veces solemos pensar y, si abrimos nuestra mirada, podemos ver que al fin y al cabo son solamente diferentes interpretaciones del mismo contenido. No hay que temer o juzgar lo que es diferente, porque es la maravillosa expresión de la vida misma en todas sus facetas», reflexiona la artista.

A Leichter le encantaría editar un libro o protagonizar una exposición con las imágenes de su blog. «Ojalá puedan ser ambas cosas cuando el proyecto crezca y yo con él. Me encantaría exponerlas de manera simultánea, aquí en Formentera y en una galería de Manhattan en las mismas fechas y con los mismos horarios, con una pantalla con conexión wifi en cada sala para que los visitantes de Formentera puedan ver a los de Nueva York y viceversa», avanza.

Por el momento Leichter tiene 157 imágenes de Formenhattan. La mayoría de ellas están tomadas con iPhone, aunque está empezando a utilizar una Canon 100D réflex.

Es escritora y durante años trabajó en agencias internacionales de publicidad. «Estoy acostumbrada a desarrollar ideas y conceptos visuales. Mi base creativa son las ideas», explica. «Me gusta explorar diferentes maneras de expresión y experimentar con herramientas diferentes para materializar las ideas. La palabra es una de las herramientas y la fotografía es la otra», concluye Leichter.

Contrastes | Más similitudes que diferencias entre dos islas de unos 85 km2

Una parte de las imágenes que Leichter ha creado para su proyecto están en ´Formenhattan.com´ y en su página de Facebook. En ellas se pueden ver comparaciones sorprendentes, muchas veces con un toque divertido, entre una urbe megalómana y una isla mediterránea que nadie diría que tienen una superficie prácticamente igual, unos 85 Km2. A través de la composición, los motivos retratados, la perspectiva o los detalles, la fotógrafa alemana consigue realmente establecer paralelismos que en teoría parecerían imposibles. En sus imágenes se ven paisajes, puestas de sol, iglesias, senderos, esquinas, ropa tendida y árboles que, dentro de las distancias evidentes, mantienen una cercanía más que notable. La intención de la fotógrafa y escritora afincada en Formentera es ir aumentando el catálogo de imágenes, algo que será posible gracias a un viaje largo que hará a Manhattan en otoño o invierno de este año.