El Ayuntamiento de Sant Josep ha abierto un expediente de infracción por la celebración el pasado viernes de una fiesta privada en el exterior en el beach club de es cap des Falcó, en el Parque Natural de ses Salines, con la instalación de un escenario después de comprobar que el Consistorio no había autorizado esta actividad. Agentes de la Policía Local se personaron por la mañana del viernes en Cap des Falcó, pero no había nadie. A las 21.30 horas regresaron, cuando la fiesta (la celebración de una boda) ya había empezado y, tras esperar la llegada del promotor y constatar que no tenía permiso para montar el escenario, levantaron un acta.

El concejal de Gobernación, Serafín Grivé, sostiene que, en ese momento, una vez iniciado el festejo, no se podía ordenar el desalojo porque suponía «un riesgo» que podía derivar en un problema de «orden público». «Había un montón de invitados y allí se podía armar la del 2 de mayo», indicó, al tiempo que señaló que la fiesta terminó «a medianoche», que es la hora prevista en las ordenanzas municipales para el cierre de las actividades musicales exteriores, según explicó Grivé. Al día siguiente se retiró el escenario.

Grivé indicó que ayer mismo se envió a la conselleria balear de Medio Ambiente una copia del acta de los agentes de la Policía Local para que actúe y determine si procede abrir también un expediente sancionador. El concejal de Gobernación señaló que, a su entender, la dirección del Parque Natural, no había autorizado ninguna fiesta privada al aire libre. Un portavoz de la conselleria balear de Medio Ambiente informó ayer a este diario de que la dirección general de Medio Natural «analizará» este asunto cuando reciba el acta que instruyó el agente de Medio Ambiente que se personó allí. Este funcionario, según las fuentes consultadas, advirtió a los promotores de que no tenían permiso para llevar a cabo la fiesta prevista y dio el aviso a la Policía Local.

El edil de Gobernación indicó que el beach club tiene licencia solo de restaurante y que solo podría celebrar la boda «en su interior», como se hace en los establecimientos de restauración de la isla. Repitió varias veces que el Ayuntamiento no autorizó el montaje del escenario: «Nosotros no permitimos este tipo de cosas y menos en una zona como el Parque Natural de ses Salines».

Sobre los fuegos artificiales lanzados hace dos semanas en es Cap des Falcó, con el riesgo de incendio que ello supone, Grivé señaló que la Policía Local no actuó porque se le comunicó «al cabo de uno o dos días». «Si lo hubiésemos sabido, habríamos acudido en el acto», dijo, al tiempo que añadió: «Entiendo que en Ibiza se ha puesto de moda la celebración de bodas, pero hay que tener sentido común y solicitar permiso».

En cuanto al incremento del control previo de este tipo de actividades, el concejal destacó que «no se puede poner a un policía en la puerta de cada beach club». «No hay que obviar que ahora tenemos un volumen de trabajo muy elevado, con la venta ambulante, los taxis pirata y el ruido por actividades musicales. Todo esto nos da mucho trabajo y tenemos los efectivos que tenemos», recalcó. También recordó que la conselleria cuenta con sus propios agentes de Medio Ambiente: «No quiero cargar contra nadie, pero si nos hubiesen avisado antes.... Cuando llegamos el escenario ya estaba montado».