Las denuncias por violencia machista presentadas en Ibiza el pasado año alcanzaron las 708, la cifra más alta registrada nunca en los juzgados de la isla desde que estos asuntos se contabilizan de manera específica. El año de más litigiosidad hasta el momento había sido 2009, cuando se registraron 652, y desde entonces nunca se había llegado de nuevo a las 600 denuncias.

En comparación con el año anterior, el incremento de denuncias se sitúa en el 25,1%, al pasar de las 566 tramitadas en el año 2012 a las 708 de 2013, de acuerdo con los datos publicados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

Este balance a final de año era ya previsible atendiendo a la evolución de cada trimestres, pues en todos se habían registrado incrementos respecto al año anterior, en algunos casos muy significativos, de más del 30%. Entre enero y marzo se interpusieron 159 denuncias, un 35,8% más que en 2012; de abril a junio, 130, lo que representa un leve aumento del 2,4%; entre julio y septiembre se recibieron 246, un 26,8% más, y de octubre a diciembre fueron 173, un dato que supone un incremento del 35,2%.

En relación a la población, los datos del CGPJ muestran que se presentaron 48,9 denuncias por cada 10.000 habitantes de las Pitiusas, y 101,2 por cada 10.000 mujeres. En 2012 fueron 39,1 y 80,9, respectivamente, y un año antes, 41,4 y 85,6, casi las mismas que en 2010.

Letrados del turno de Violencia sobre la Mujer, que asisten a las víctimas, no pudieron explicar el aumento, ya que su percepción es parcial, al repartirse los asuntos entre varios. Uno indicó como ejemplo que él llevó más casos en 2012.

Más denuncias de otras personas

De esas 708 denuncias, el 69,8% las presentó la propia víctima. Este porcentaje es el más bajo desde el año 2007, lo que se explica con un ligero aumento de los casos conocidos a través de familiares y con un incremento más destacable de los que llegaron por partes de lesiones o terceras personas.

Concretamente, 465 mujeres interpusieron denuncias en la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía o en los retenes de la Guardia Civil, mientras que 29 acudieron directamente al juzgado, lo que suma 494. Años antes el número de víctimas que denunciaron solo fue superior en 2011, con 495, y 2009, con 510, como se detalla en el gráfico que acompaña a esta información.

Por su parte, 97 denuncias llegaron a través de partes de lesiones (el año anterior fueron 27 y nunca habían pasado de las 53 registradas en 2010), 79 mediante la intervención policial directa (esto varía año a año; en 2012 fueron 96 y no se ve evolución o tendencia alguna) y 24 por servicios de asistencia o terceros (el año pasado fueron 9 los casos conocidos así, la cifra más alta contabilizada hasta entonces). En cuanto a familiares, en 2013 catorce denunciaron casos de violencia de género, mientras que años atrás no habían superado la decena.

El principal delito referido en las denuncias es el de lesiones y malos tratos físicos o psicológicos, o ambos. En 2013, de los 708 casos que llegaron al juzgado, 575 se debían a hechos de este tipo, un dato que representa el 81,2% del total. Este porcentaje es similar al de los dos últimos años, según los datos recopilados por este diario.

Delitos contra la libertad constituyeron el segundo grupo de hechos más denunciados, con un total de 65, seguidos de los quebrantamientos de condenas o medidas cautelares (24), delitos contra la intregidad moral (22) y contra los derechos y deberes familiares (11).

En los años anteriores los delitos que más se denunciaron, al margen de los de malos tratos, fueron los quebrantamientos de penas y medidas cautelares y aquellos contra los derechos y deberes familiares.

280 órdenes de protección

A lo largo de 2013 se solicitaron 280 órdenes de protección, de las cuales 232 fueron pedidas por las propias víctimas. De ellas, se acordaron 187, si bien entre el resto hay muchas que se denegaron al establecerse en sentencia. En 2012, el número de medidas de este tipo demandadas fue superior, con 304, mientras que años anteriores fueron 257 (en 2011), 254 (2010), 294 (2009), 291 (2008) y 214 (en 2007).

De esas órdenes de protección, como es habitual, la mayoría eran de alejamiento y prohibición de comunicación o de volver al lugar del delito. Además, 152 fueron privativas de libertad.

Las solicitantes fueron 142 mujeres españolas y 138 extranjeras, todas mayores de edad. En los últimos años se había visto un incremento de las peticiones para mujeres extranjeras, algo que se rompió en 2013 aunque la diferencia no es muy elevada. Por su parte, los denunciados eran 133 españoles y 147 extranjeros. En este dato se dan oscilaciones, si bien en 2012 también hubo más denunciados extranjeros.

Asimismo, la mayoría de víctimas y agresores habían sido pareja sentimental (186 frente a 94 que habían roto). Un año antes habían sido mitad y mitad.

144 hombres juzgados

En 2013, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer juzgó a 144 hombres y de estos, el 87,5% fue condenado. Según los datos del CGPJ, se condenó a 70 españoles y 56 extranjeros, y se absolvió a 14 y cuatro, respectivamente. En 2012 el número de hombres enjuiciados fue menor, con 124, si bien el porcentaje de los condenados fue similar, con un 86,3%. En 2011, sin embargo, habían sido 149 y el porcentaje de condenados, menor (74,5%).

El 41,8% de los asuntos cerrados por el juzgado terminaron en sobreseimiento provisional, la mayoría por no resultar justificada la perpetración del delito. Otro 19,1% se cerró de forma libre, sobre todo porque el hecho denunciado no era constitutivo de delito. Los porcentajes son superiores a los del año pasado y 2011, cuando la suma de sobreseimientos no superó el 59%.

Además, el 17,8% de las causas finalizó con una sentencia, casi todas condenatoria, y otro 17,8% de los asuntos se elevó a los juzgados de lo Penal. En los dos años anteriores, el porcentaje de sentencias condenatorias fue superior, por encima del 20%, y el de asuntos trasladados a otros órganos fue similar.