Un barco de transporte de gas de bandera italiana que fondeó en el exterior del puerto de Ibiza el pasado martes 24 de diciembre, seccionó con su ancla uno de los tres cables submarinos que unen la isla con Mallorca y que garantizan las comunicaciones telefónicas de voz, ADSL y de datos para dispositivos móviles.
Los usuarios prácticamente no se dieron cuenta de la incidencia, que no llegó a ser avería debido a que Ibiza cuenta con tres enlaces submarinos de estas características con Mallorca, por lo que las comunicaciones se mantuvieron en todo momento. Solamente algunos abonados pudieron notar que su velocidad de conexión a Internet disminuía pero en ningún momento hubo cortes tal y como ocurrió este verano en Formentera que, durante una semana, quedó incomunicada con el mundo debido a que dos barcos seccionaron con sus anclas el único cable submarino que garantiza las telecomunicaciones en esta isla.
El departamento de comunicación de Telefónica informó ayer de que la incidencia de Ibiza coincidió con que el barco especializado en el arreglo de cables submarinos ´René Descartes´, de bandera francesa, fletado por la compañía, se dirigía a Ibiza para realizar labores rutinarias de mantenimiento, por lo que los técnicos se centraron primero en la reparación de la sección del cable afectada por la ruptura. Las mismas fuentes señalaron que la previsión es que todos los trabajos queden concluidos mañana.
Telefónica insistió en que «esta incidencia no se puede considerar como una avería» ya que el tráfico de información, datos y voz fue redireccionado automáticamente por los otros dos cables submarinos.
