A los diez días de huelga en la enseñanza, el conflicto sigue enquistado. El miércoles parece que se había dado un pasito para avanzar hacia la desconvocatoria de la movilización, pero ayer los sindicatos y la Assemblea de Docents abandonaron frustrados la reunión con la conselleria de Educación al no haberse puesto nuevas propuestas sobre la mesa: «Nos hemos encontrado un muro». De momento, en lo que se refiere al TIL, el Govern oferta negociar el calendario de aplicación a partir del próximo curso y que éste año sea voluntaria su aplicación en 1º de ESO, algo insuficiente para los huelguistas. Mañana a las cuatro de la tarde ambas partes vuelven a reunirse.
En segundo ciclo de Infantil y en 1º, 3º y 5º de Primaria se mantiene su instauración este año «porque el TIL es la apuesta y el proyecto de este Govern», según indicó el secretario autonómico de Educación, Guillem Estarellas. Con todo, insistió en que su objetivo es conseguir resultados «lo más rápido posible para garantizar el derecho a la educación de todos». Estarellas reconoció que no había novedades respecto a la mesa sectorial del miércoles que fue «para iniciar el diálogo». Ayer convocaron, por primera vez y con la presencia del movimiento asambleario, los comités de huelga: «Los que pueden desconvocar la protesta».
La manifestación sigue
Pero eso no parece que vaya a suceder este semana (más teniendo en cuenta que cualquier propuesta será llevada a las asambleas antes de anular las protestas). «La manifestación del domingo sigue, más que nunca, y la huelga también», sentenció Biel Caldentey, secretario general del STEI-i, que calificó la situación de «enrocada». Nosotros, aseguró, ya hemos cedido mucho: «Hemos pasado de exigir la retirada de la reforma, a pedir retrasar el calendario de aplicación y de allí hemos acabado por aceptar una aplicación voluntaria». Toni Baos, secretario general de enseñanza en CC OO, insistió en la necesidad de que Educación respete la autonomía de centro y a los consejos escolares y que «escuche lo que dice la calle, porque ésta es una cuestión social».
Iñaki Aicart, representante de la Assemblea, acudió a la conselleria con una copia del programa electoral de educación del PP, habiendo subrayado su primer punto: «Una educación fruto del consenso». El portavoz valoró como «hito» que Educación les haya reconocido por primera vez como interlocutores válidos y anunció que la asamblea que tenían prevista para hoy se traslada a mañana por la mañana. Indicó además que la caja de resistencia ya atesora 200.000 euros.
Los puntos importantes que quedan en el tintero para los sindicatos, aparte de la instauración del TIL, son: la retirada de los expedientes a los directores de Maó (rehabilitados el miércoles como profesores) y la retirada de la ley de Símbolos, una norma cuya aprobación Caldentey califica de «sarcasmo» al haberse comprometido Educación a negociar el proyecto de convivencia escolar (que prevé duras sanciones para los docentes por expresar su opinión en el aula).
En la lista de promesas del departamento de Educación también está la revisión de las plantillas y ratios; mantener los presupuestos de los centros y aumentarlos si es posible; aumentar el dinero destinado a becas; mejor el acuerdo para los interinos y sustituir las bajas docentes antes de los 30 días en casos excepcionales.
