­Pena de muerte para quien mate a un oso panda. Para quien venda medicamentos falsos. Para aquel que ose falsificar moneda. Para quien deserte del ejército. Y así hasta 50 motivos por los que en China se aplica la máxima condena. A todos ellos hicieron ayer referencia las activistas de Amnistía Internacional en Eivissa durante la jornada de concienciación que celebraron en Vara de Rey. La coordinadora de la asociación en Eivissa, Patricia Guirao, recordó que a final de mes en Madrid se celebra el Congreso Internacional Contra la Pena de Muerte y por eso están intentando hacer presión entre la sociedad española para que se conciencie sobre este tema.

Guirao explicó que este año Amnistía se centra en China porque, aunque mucha gente lo desconoce, es el país en el que más penas de muerte se aplican al año. «Pero es un país en expansión y a los países que tienen negocios con China no les interesa que se sepa este dato. Lo tapan», lamenta Gemma Ramon, otra de las activistas.