­Un médico, que fue denunciado por expedir una falsa receta por su socio, un colega de profesión de su misma clínica, ha sido absuelto. El fiscal pidió el pago de una multa de 2.700 euros por un presunto delito de falsedad en documento oficial. La acusación particular, en representación del denunciante, solicitó además la inhabilitación profesional del procesado.

El encausado cumplimentó y firmó una receta el 10 de mayo de 2001 a nombre de su socio, que figuraba como paciente. En el talonario oficial del Colegio Oficial de Médicos de Balears no se prescribía medicación alguna.

Seis años más tarde, el 1 de febrero de 2007, el socio denunció al otro médico, que se sentó en el banquillo el pasado 26 de febrero, casi doce años después de firmar la receta. La magistrada Martina Rodríguez, titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Ibiza, explica en los fundamentos de derecho de la sentencia que el delito había prescrito ya cuando se presentó la denuncia.

Estaban enemistados

Además de no considerar lo sucedido como un delito de falsedad, la juez recuerda que los socios, que regentaban una clínica privada en Sant Antoni, estaban enemistados.

De hecho, el supuesto perjudicado presentó la denuncia el 11 de febrero de 2007, solo diez días después de que el ahora absuelto, su socio, fuese condenado por un delito de lesiones, por atropellarle.