Los mayores de las residencias de Ibiza pudieron disfrutar ayer de un paseo por la feria Ibiza Medieval donde fueron recibidos por Xarop de Canya, una compañía de Barcelona con 23 años de experiencia en animaciones de calle y todo tipo de mercados temáticos, que se estrena en el ibicenco. «Nuestro objetivo es hacer que la gente participe de la fiesta», explica Emili Legaz, uno de los seis componentes de la agrupación que toca una tarota, un oboe popular de calle, acompañado por los instrumentos de percusión de sus compañeros y personajes que parodian la época medieval. «La feria acaba de empezar pero nos encantaría repetir», asegura Legaz.

Así, todos los artistas coinciden en que el mercado de Ibiza es uno de los mejores del circuito, tanto por el público, no tan castigado por la crisis, y por el marco con las murallas renacentistas y la Catedral como fondo. Este es el caso de Al Folk, una de las formaciones que más está gustando en la feria con su música y danzas árabes. «Somos una mezcla total, con componentes de Galicia, Andalucía y el Norte de África», explica Otmane Benyahya, uno de sus miembros junto a Mohamed y Tufick Bannoun, Nico Bello (que toca la gaita gallega) y Manuela Caballero. Esta bailarina acapara todos los objetivos de las cámaras con su sensual danza del vientre. Este grupo comenzó en 2001 y desde entonces han ido madurando «como el buen vino», subraya Otmane. «Siempre que podemos volvemos a Ibiza porque nos ha dejado un buen sabor de boca. Hay buen tiempo y buena gente con ganas de fiesta», remarca. «Soñamos con un país mediterráneo sin fronteras», añade.

Los Gambuzinos no vienen de la costa mediterránea sino de la atlántica, ya que su origen es portugués. «Nos gusta todo de la feria de Ibiza, es estupenda», explica uno de los componentes del grupo, que en ese momento ofrece un pasacalles por sa Carrosa con un repertorio medieval y algunos temas populares portugueses.

En casi todos los rincones de la feria hay algún espectáculo del que disfrutar. Los componentes de Jabardeus apenas tienen unos segundos para posar para la foto y salir corriendo a su próxima actuación. Estos músicos del norte de España, sobre todo León y Cantabria, arrancan aplausos en su actuación y no pocos espectadores mueven las caderas y taconean animados por la saltarina música.

Los alumnos de Primaria de varios colegios de la isla visitaron ayer la feria a iniciativa del Consistorio para que pudieran disfrutar de los espectáculos pensados especialmente para ellos. Un detalle que agradecieron los grupos teatrales, que temían que sus actuaciones de la mañana no contasen con público, dado que estaban programadas en horario escolar. Este es el caso de Marisa Ibáñez y Sergio Chaves, del grupo La Troupe Malabó de Castellón, que ofrecieron su actuación ´Magia medieval´ en el rincón infantil preparado junto al baluarte de Santa Llúcia. Los pequeños se lo pasaron en grande con, entre otras, la historia de un malabarista que en lugar de malabares hacía ´calamares´ y un mago con serias dificultades de concentración para ejecutar sus trucos.

Los animales, en el baluarte de Sant Pere, son sin duda otro de los focos de atención en la feria. Este año los trae la empresa El Centauro, de Tudela del Duero, Valladolid, que visita por primera vez el mercado. Burritos que los niños pueden montar a un precio de tres euros, ocas, pavos, patos y gallinas guineanas componen la oferta principal, según explica Ana Delia García, portavoz de la empresa.