­Una operación antidroga llevada a cabo la semanada pasada en Ibiza por la Guardia Civil se saldó finalmente con 23 personas detenidas y la incautación de cuatro kilogramos de cocaína, once kilos de hachís, dos kilos de marihuana, 750 gramos de éxtasis, siete vehículos y 35.500 euros, según la información oficial difundida ayer por el instituto armado.

La operación Arubi empezó hace un año después de que la Guardia Civil tuviera conocimiento de la comercialización de cocaína, hachís y éxtasis en viviendas y locales de ocio de Ibiza, lo que estaba ocasionando una «gran alarma social» entre la población.

La red, compuesta en su mayoría por ciudadanos de origen marroquí, estaba liderada por una persona de esta misma nacionalidad apodada el Intocable, que a pesar de su actividad ilícita había eludido en diversas ocasiones la acción de la justicia, detalla la nota de prensa.

Como resultado de la investigación, que ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Ibiza, la semana pasada se detuvo a 17 personas en la isla, doce marroquíes y cinco españoles, como presuntos miembros de esta red.

Tal y como ya publicó este diario el pasado fin de semana, los agentes dejaron en libertad a seis de ellos después de tomarles declaración en el juzgado, mientras que los once restantes pasaron a disposición judicial. Finalmente, cuatro quedaron libres con cargos y los otros siete fueron enviados a prisión, aunque dos podrán eludirla pagando una fianza.

Además, en el transcurso de la investigación y en fechas no detalladas se detuvo a otras seis personas encargadas de trasladar la droga desde la Península o el norte de África hasta Ibiza para su distribución y venta.

Los agentes registraron un total de diez domicilios en la isla. En uno de ellos, en Sant Josep, hallaron estupefacientes, dinero y una libreta con anotaciones de las transacciones comerciales escondidos en una perrera que había en esta casa y entre la paja de un gallinero.