­Los talleres tendrán que certificar que han solucionado los problemas detectados en los coches en la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Así lo anunció ayer Lourdes Cardona, secretaria autonómica de Promoción Empresarial y Empleo, a los socios de Ibiza de la Associació d´Empreses d´Automoció i Nàutica de Balears (Asema) en una reunión celebrada ayer por la mañana en la isla y a la que asistieron alrededor de una treintena de asociados.

Cardona explicó que la decisión se adoptó el viernes, que esta misma semana se empezará a tramitar y que la intención es que este sistema esté vigente «en unos pocos meses». Cuando un vehículo no pase la ITV, no podrá obtener el permiso para circular si no presenta en las instalaciones de la carretera de Santa Gertrudis un documento en el que el taller certifique que ha reparado los problemas detectados en la primera inspección.

«Esto ayudará a los talleres que están cumpliendo con sus obligaciones porque esas reparaciones no se podrán hacer en cualquier lado», apuntó la secretaria. «El taller certifica esa reparación, pero también se hace responsable de ella», insistió el presidente de Asema, Joan Oliver, que se mostró muy contento con esta medida.

Lourdes Cardona también anunció a los socios que la próxima semana «se desplazará a Ibiza una técnica de Mallorca para hacer inspecciones en los talleres». Su objetivo principal será descubrir algunos negocios ilegales cuya existencia han denunciado algunos socios de Asema de la isla, aunque también realizará inspecciones en establecimientos regulados. «Todos los que están en activo deben tener los papeles», afirmó Cardona, que lamentó no contar con «una flota de personal» para detectar y clausurar talleres ilegales.

En este sentido, señaló que las denuncias les llegan de la propia asociación y de particulares. «Es un trabajo difícil y complicado, pero entre todos lo conseguiremos, sobre todo por las denuncias de los asociados, que nos dicen dónde puede haberlos», añadió la secretaria autonómica, que destacó la colaboración de la Delegación del Gobierno, ya que la Policía acude a las inspecciones de talleres ilegales a los que el personal de la conselleria no puede ir.

Oliver resaltó la preocupación que hay en el sector por este tipo de establecimientos, especialmente en este momento de crisis. El portavoz de la patronal explicó que no solo se han reducido las visitas a los talleres, si no que para muchas de las reparaciones la gente recurre a talleres ilegales o a amigos que tienen nociones de mecánica porque les sale más barato.

«Hay poco dinero y gastamos lo menos posible en cualquier cosa. Si hay que cambiar el aceite y cuatro filtros al coche, pero vemos que podemos pasar cambiándole solo el aceite y un filtro, es lo que hacemos aunque perjudique al coche. Es el día a día en los talleres», ilustró. Oliver explicó también que en estos momentos, para abaratar el coste final de las reparaciones, los clientes piden a los talleres cada vez más que busquen las piezas en los desguaces.

Oliver, que denunció que los talleres tienen ahora «pocos ingresos y muchas obligaciones» negó que debido a la crisis atiendan más reparaciones que antes porque la gente aguante más tiempo con su coche viejo antes de comprarse uno nuevo. «No hay la movida que había antes en los talleres», sentenció el presidente de Asema.