­Ni los organizadores de la gran fiesta solidaria de la Asociación Ibiza y Formentera contra el Cáncer podían imaginar el éxito de la convocatoria, que literalmente colapsó los accesos al Recinto Ferial en momentos concretos de la jornada. Más de 1.500 personas habían entrado al recinto solo hasta mediodía de ayer y la mayoría de ellos salían con bolsas de libros y discos de segunda mano, dulces o juguetes que habían adquirido en alguno de los puestos instalados o bien les había tocado en alguna rifa.

Decenas de voluntarios, todos ellos ataviados con la característica camiseta roja de la asociación, se ocuparon de los puestos desde las 12 de la mañana hasta las 21 horas sin perder la sonrisa y el buen humor.

En los mostradores de comida la actividad era frenética. Jacquie Perry, portavoz de la directiva, se mostraba encantada de la buena acogida. «Estamos trabajando desde agosto para conseguir el máximo de participación de empresas y particulares en esta fiesta», explicaba. «Todo el dinero se queda en Ibiza y Formentera para ayudar económicamente a los pacientes con cáncer y a sus familias», subrayaba la voluntaria justo antes de subir al escenario para anunciar, en inglés y castellano, una nueva actuación. Y es que una de las características de esta asociación es que cuenta con muchos socios británicos. No en vano su presidenta, Hellen Watson, ha sido incluso cónsul británica en la isla. Triunfaron por tanto los dulces británicos, entre los que no faltaban los cupcakes, los pastelitos de canela o jengibre, además de las clásicas mermeladas de naranja amarga. «Todo es casero, lo hemos hecho nosotras», explicaba una vendedora mientras empaquetaba un pastel.

Entre comida, bebida y puestos de ropa, libros y juguetes, el Recinto Ferial se convirtió en un gran bazar donde el visitante podía encontrar tanto piezas de mobiliario como bolsos, pasando por zapatos de primera y segunda mano, material deportivo, artesanía y hasta arte y antigüedades en la subasta de Casi Todo.

«Yo he comprado un calendario solidario de cinco euros, unas cremas y también hemos comido unas hamburguesas. Ahora me llevo el postre a casa para tomar el café», explicaba Maripaz Núñez, una enfermera retirada que asegura que no ha tenido ningún caso de cáncer en su familia pero sí ha visto muchos en el hospital de la Península en el que trabajaba. «Hay que colaborar, que eso no cuesta nada», remarcaba.

Mientras en el escenario se sucedían las actuaciones de Vila Dance, Party Planet y de Cachirulo, ente muchas otras, otros asistentes disfrutaban con la exposición de dibujos del concurso infantil con temática ibicenca. Las dos ganadoras fueron Sofía Higueras, del colegio Can Cantó, y Pilar Baradat, del colegio Sa Bodega.

Ayudar a los enfermos y a sus familias no es la única tarea de la asociación, que también se centra en la labor preventiva. En este sentido, la asociación ya anuncia que en febrero del próximo año volverá a poner en marcha en Sant Antoni la campaña de prevención del cáncer de colon.