Cerca de 400 padres salieron ayer por la mañana a la calle para protestar contra los recortes que se están haciendo en educación. Las familias, además, exigieron el «rescate» de la enseñanza en la manifestación convocada por la Federació d’Associacions de Pares d’Alumnes (FAPA) de Ibiza.

En un principio, la intención de los padres era unir, con una cadena humana, el parque de la Paz, el Consell de Ibiza, la delegación de Educación y el paseo Vara de Rey, algo que no fue posible. El vicepresidente de la organización, Ramón Roca, explicó en el parque de la Paz, antes de iniciar el recorrido, que la Delegación de Gobierno no les había dado permiso, ya que la cadena implicaba cortar el tráfico en buena parte de la ciudad.

Aunque la protesta estuvo formada, principalmente, por padres y madres, también asistieron algunos profesores. ‘Prou retallades. Rescatem l’educació pública’, se leía en la pancarta que encabezaba la protesta. Del parque de la Paz salieron algo más de 250 personas, a las que se fueron sumando más familias durante el recorrido. Al llegar a Vara de Rey, donde todos pudieron marcar ‘un gol por la enseñanza pública’ en una pequeña portería, sumaban casi 400.

Casi todos los asistentes, vestidos de verde, llevaban, además, colgadas en el pecho hojas en las que se definían a ellos mismos como «padre preocupado», «madre preocupada» o «alumno preocupado», entre otros. Todos, hasta los más pequeños, hicieron el recorrido sin parar ni un segundo de gritar la única consigna: «Prou retallades, rescatem l’educació». Tras tanto chillar, la presidenta de la FAPA en Ibiza, Conchi Romero, tuvo que hacer un esfuerzo para alzar la voz y leer el manifiesto.

Una situación «preocupante»

Romero afirmó que la situación de la educación en las Pitiusas es «preocupante». «La insuficiencia de las infraestructuras necesarias, el aumento continuo de la población, la falta de previsión en los últimos años, la tasa de abandono escolar de nuestros jóvenes y la precaria oferta de ciclos formativos han provocado en la sociedad ibicenca, y sobre todo entre los padres y madres, un grave sentimiento de malestar y decepción», señaló antes de pedir a los políticos que hagan «lo posible» para solucionar esta situación.

Los padres exigieron que se interrumpan «definitivamente» los recortes, la finalización de las obras pendientes y la construcción de los centros prometidos, que se cubran las bajas de los profesores «a partir del primer día» y que se mantengan la reutilización de libros, la escola matinera y el horario lectivo actual. Romero hizo especial hincapié en la importancia de no aumentar el número de niños por aula. «¡Freno a los recortes en materia educativa ya! ¡Recuperación de todos los derechos suprimidos ya! ¡Por una educación pública de calidad ya!», concluyó Romero, tras lo que las familias, en silencio durante la lectura, volvieron a chillar, pitar y aplaudir casi con la misma fuerza con la que lo habían hecho minutos antes. Primero frente a la sede del Consell de Ibiza, donde Romero y Roca entregaron una copia del manifiesto, y después delante de la sede de la delegación de Educación. Allí, tras confundirse de puerta, algunos de los manifestantes aporrearon con fuerza la persiana metálica mientras el resto de las familias y profesores continuaba clamando a favor de la enseñanza pública.

FAPA: «Esperamos que se nos escuche»

La presidenta de la Federació d’Associacions de Pares d’Alumnes (FAPA) de Ibiza, Conchi Romero, se mostró ayer contenta con la participación de las familias en la cadena humana. A pesar de esto pidió a padres, madres y abuelos que «sean conscientes de lo que se nos viene encima el próximo mes de septiembre» y luchen por una educación pública de calidad para sus niños. Romero tiene esperanzas de que el Govern balear recapacite y «revierta» los recortes que se están haciendo. «Esperamos que después de esta movilización se nos escuche», deseó. La FAPA no descarta continuar con las movilizaciones los próximos meses. «Seguro que si hacemos otra cadena humana seremos más familias», afirmó, convencida Romero.