­Alrededor de 350 personas participaron en la cacerolada convocada en la plaza frente a Sa Graduada por los sindicatos educativos y la Federació Autònoma d´Estudiants de Balears (Fadae), en el acto central de la jornada de protestas contra los recortes en la educación que se realizó ayer en las Pitiusas. Los concentrados, sobre todo docentes, denunciaron la pérdida de calidad en la enseñanza que traerán los planes del Govern.

Además de aumentar la carga lectiva de los profesores, la reducción de la jornada escolar en los institutos y el aumento de las ratios en todos los ciclos supone «un grave retroceso de varias décadas» en las condiciones en que se educa a las generaciones más jóvenes, denunció Pere Lomas, del STEI-i. «Se estaba en el camino de la atención cada vez más individualizada», pero la reducción de interinos obligará a desatender «la diversidad de problemáticas que hoy existe en los centros». El líder de UGT en las Pitiusas, Diego Ruiz, echó en falta «muchos padres y alumnos», síntoma de «la falta de implicación» de los progenitores en el día a día de la educación de sus hijos.

Adrián Torres Rosa, coordinador de la Fadae, fue el encargado de leer el manifiesto, en el que se recordó que la educación «ha sido garantía de cohesión social y de igualdad de oportunidades», y es la «mejor inversión que pueden hacer las administraciones para salir de la crisis». La ruidosa concentración ensordeció los alrededores del antiguo colegio durante más de una hora.

Entre las presentes hubo dos abuelas, Antonia y Carmen, y una bisabuela, Eduarda, «bastante preocupadas» con las consecuencias que tendrán los recortes en el futuro de sus nietos y bisnieto, respectivamente. También Victòria, de nueve años, aporreaba una tapa de olla con un cucharón de madera para oponerse a que «pongan a más niños en cada clase», porque eso perjudicará a su educación.

Buena parte de los asistentes vestían de riguroso negro, de luto por el futuro que le espera a la educación y a los docentes, con pancartas contra las medidas del Govern: ´No retallis el meu futur´ o alusivas a la masificación que se espera el curso que viene: ´Els meus alumnes, els teus fills, no són conills´.