La bahía de Sant Antoni no recibía la llegada de un gran crucero desde 1983. De ahí que la visita del ´Seabourn Pride´, que permaneció fondeado durante toda la jornada de ayer, se convirtiera en un acontecimiento. «Estamos muy felices. Es la primera vez que tenemos un crucero aquí desde hace 29 años», dijo el director general de Puertos y Aeropuertos del Govern balear, Antonio Deudero, al capitán de la buque, Vagn Jensen, al tiempo que la alcaldesa, Pepita Gutiérrez, le invitó a regresar cuando lo deseen.

El ´Seabourn Pride´, de 134 metros de eslora y de 208 pasajeros y 160 tripulantes, arribó a Sant Antoni sobre las 10 horas y, pese a que por su envergadura era posible su atraque en el puerto, se decidió que permaneciera fondeado en la bahía, a media milla de la localidad.

Procedente de Maó y con destino a Málaga, hacia donde tenían previsto partir alrededor de las 21 horas, el crucero realiza un trayecto de diez días desde Civitavecchia, en Roma, con destino a la capital portuguesa. A lo largo de la ruta, explicó Jensen, realizan paradas para que los viajeros, la mitad de los cuales son norteamericanos y prácticamente la mayoría de edad avanzada, puedan pasar el día en distintos lugares y «sentir la cultura y la ciudad». En esta ocasión, eligieron Sant Antoni como destino para una de las jornadas lúdicas.

«Nunca antes habíamos estado aquí. Nos gusta conocer lugares bonitos. Nuestros pasajeros viajan y viajan, conocen todo el mundo, y buscan nuevos destinos», comentó Jensen, quien apostilló que la localidad portmanyí les pareció, en ese sentido, «interesante». El capitán resaltó que el ´Seabourn Pride´ y el resto de barcos de la compañía –que tiene solo seis– son cruceros de 200 a 450 pasajeros, no «miles de huéspedes», luego son una clientela selecta que busca otro tipo de destinos. A este respecto, comentó que al regresar a bordo, intentan conocer las impresiones de los viajeros acerca del lugar y que si estas son buenas y «va bien», es posible que más barcos de la compañía lleguen hasta Sant Antoni.

Este fue el deseo expresado tanto por Gutiérrez como por Deudero durante el acto de bienvenida celebrado en el crucero y que contó con la asistencia de la consellera de Turismo, Carmen Ferrer, el director insular de la Administración del Estado, Rafael García Vila, los concejales de Sant Antoni Vicent Costa Maymó y Vicent Ribas, el director gerente de Ports, Daniel Ramis, y el comisario del Cuerpo Nacional de Policía, Julio Suárez, entre otras personas.

«Que vengan más barcos»

«Esperamos que nuestro pueblo sea de su agrado y de sus clientes y que el traspaso de esta información a la compañía haga que puedan venir más barcos», resaltó la alcaldesa, quien entregó a Jensen un libro de la fotógrafa Christine Spengler y una figura de dos payeses de cerámica con una placa en la que el Consistorio agradece al ´Seabourn Pride´ que haya elegido Sant Antoni como uno de sus destinos. También Deudero entregó al capitán una figura de un noray, a la vez que Jensen les ofreció una placa como recuerdo de la visita.

Durante el día, decenas de pasajeros se acercaron a la Oficina de Turismo de Sant Antoni para pedir información cultural, turística y comercial. Y es que los viajeros tenían la posibilidad de bajar a tierra desde primera hora, algo por lo que optaron muchos, o de hacerlo en cualquier momento, ya que había barcas a su disposición para trasladarlos hasta el puerto, indicó el edil de Turismo, Vicent Ribas. Entre los viajeros también hubo quien optó por conocer otros lugares de la isla e ir, por ejemplo, a Vila aprovechando la celebración de la Feria Medieval.

Deudero calificó de «muy trascendente» la llegada del ´Seabourn Pride´ que, dijo, responde a la labor de promoción de los puertos autonómicos como puntos de acceso para cruceros. Resaltó que todas las administraciones deben hacer «un esfuerzo conjunto» para lograr que «una actividad que puede dar tantos frutos a la Comunitat Autònoma pueda salir adelante».

Sobre la posibilidad de que esta temporada turística lleguen más cruceros a Sant Antoni, dijo que «está todo apalabrándose». «Lo importante es empezar», afirmó Ribas. Según Deudero, se están perfilando los protocolos de actuación, ya que se estaba pidiendo «documentación a los buques que era más de índole mercante de tráfico regular». «Estamos implementando sistemas que impulsen y promuevan que esta actividad tenga todas las garantías, cumpla todos los requisitos y se lance a la mayor brevedad», dijo.

Asimismo, comentó que para los cruceros que puedan llegar, la fórmula del «fondeo con barqueo» es en este momento «la más directa, rápida e inmediata», pues no necesita de inversión añadida que la situación actual «no permite».

La administración: La declaración de Sant Antoni como puerto fronterizo, en trámite

El director general de Puertos y Aeropuertos del Govern, Antonio Deudero, dijo que se han realizado gestiones para que el puerto de Sant Antoni, al igual que el de Ciutadella (Menorca), puedan ser considerados puertos fronterizos Schengen, de forma que los buques que lleguen a los puertos de Balears «pudieran ser de cualquier tipo de destino diferente».

«Es una tramitación larga y difícil. Tiene que tener el visto bueno de tres ministerios –Economía, Fomento y Asuntos Exteriores–, luego tiene que recabarse el de la Unión Europea y al final la decisión la toma el Consejo de Ministros», dijo Deudero, que añadió: «Y en eso estamos».

No obstante, dijo que mientras esto se lleva a cabo, hacen una actividad de fomento para que algún crucero, como el ´Seabourn Pride´, se acerque a Sant Antoni e incluya su puerto como punto de «recalada» en sus catálogos de rutas.