­Los directores de centros de Secundaria de Balears defienden el modelo lingüístico actual y piden al Govern de José Ramón Bauzá «que no siembre incertidumbre» en este campo, según señalan en una carta que firman Antoni Quintana, Rafel Andreu y Rafael Recio, presidentes de las asociaciones de directores de Secundaria de Mallorca, Menorca y las Pitiusas, respectivamente. Los tres piden al Govern que el Pacto educativo, del que el conseller balear de Educación, Rafael Bosch, presentó el documento base el 6 de marzo, no sea la excusa para introducir «elementos de distorsión». «Este pacto en ningún caso puede abrir las puertas a educar a generaciones de ciudadanos analfabetos o semianalfabetos en lengua catalana», afirman. «Si el objetivo es el conocimiento de las dos lenguas, la misión de la escuela debe ser compensar las desigualdades lingüísticas de la misma manera que compensamos otras desigualdades», añaden.

«Que quede clara nuestra firme y decidida voluntad de participar activamente en la redacción del Pacto, pero que también quede bien clara nuestra postura sobre cómo de satisfechos nos sentimos de nuestro modelo lingüístico», afirman en la carta. De hecho, los directores de centros consideran que el actual planteamiento de utilización del catalán y el castellano en las clases es «un modelo exportable y que puede servir a otros territorios con dos comunidades lingüísticas» y recuerda que se implantó por consenso: «Lo hemos hecho entre todos, con la unidad de nuestro Parlament, desarrollado por gobiernos de todos los colores políticos y llevado a la práctica por unos profesionales comprometidos con la cultura y la lengua de las Illes Balears».

Los docentes reclaman «un clima que favorezca el aprendizaje» así como «estabilidad normativa» y que todos los profesionales se sientan «apreciados». Además, indican que, entre otros conceptos (colaboración con las familias, compromiso, modernización…), el Pacto por la Educación menciona la tercera lengua en las aulas. «Si hasta ahora el sistema educativo ha sido capaz de hacer de estas islas un modelo de bilingüismo, ahora nos toca explorar un modelo trilingüe que no ponga en peligro los éxitos conseguidos», añade el documento.

Los directores consideran que el modelo lingüístico regulado desde 1997 por el llamado decreto de mínimos «ha sido un modelo de éxito, éxito académico, éxito pedagógico y éxito en la integración social». Aunque reconocen que el dominio de ambas lenguas por parte de los alumnos es «mejorable» aseguran que la utilización del catalán como lengua vehicular de la enseñanza «no ha hecho recular ni una pizca el castellano, como algunas voces querían hacer suponer a principios de los años 90». De la misma manera asegura que tres evaluaciones de diagnóstico en cuarto de Primaria y segundo de Secundaria avalan que la baja competencia lingüística de los alumnos «no es atribuible al catalán en ningún caso».

Los docentes recuerdan que los centros han ayudado a la cohesión social «en la década de más inmigración de nuestra historia» y plantean dos preguntas: «¿Alguien se quiere imaginar cómo sería esta sociedad si la escuela no hubiera contribuido a la equidad lingüística? ¿Alguien se quiere imaginar unas Illes Balears con dos comunidades lingüísticas que vivan una a espaldas de la otra?».

Las claves

ENLLAÇATS PER LA LLENGUA

Los profesores del colegio Can Misses, con lazos cuatribarrados

«¡En el colegio Can Misses de Ibiza cada día somos más los maestros que nos ponemos el lazo!», aseguran los docentes de la escuela en el mensaje que han dejado en el perfil de Facebook de la campaña de defensa del catalán ´Enllaçats per la llengua´.

PROPUESTA

Rentabilizar la inversión

En la carta, los presidentes de las tres asociaciones de directores de las islas señalan que hay que «rentabilizar la inversión económica que supuso la formación del profesorado para hacer del catalán lengua vehicular de la enseñanza».